VALÈNCIA. En ocasiones, los conflictos nacen de malentendidos. Este martes fue el turno de Podemos y Compromís, que se enzarzaron tras una proposición del síndic de la formación morada, Antonio Montiel, para regular el espacio público destinado a los invitados en las sesiones parlamentarias. Esta propuesta pedía concretamente que hubieran más asientos para el público que desee asistir a los plenos de Les Corts, así como que cuando no se cubra el cupo reservado a los grupos parlamentarios y al Consell, se destine al público de la calle.
El texto, que según Montiel repartió al resto de grupos parlamentarios y que pasará este miércoles por registro, detalla una asignación de invitados equivalente a la representación parlamentaria que tiene cada partido en la Cámara valenciana. Así, al PP le otorgan siete; a PSPV y Compromís, cinco por grupo; Podemos, cuatro; y Ciudadanos tres -pues actualmente tiene nueve diputados al perder a el 30% de su representación en el parlamento valenciano tras la marcha de Alexis Marí, David de Miguel, Domingo Rojo y Alberto García-; y a los diputados No Adscritos (actualmente son seis contando con Covadonga Peremarch y Miquel Domínguez), un invitado de manera rotatoria entre los parlamentarios solicitantes. Hasta llenar el cupo máximo de invitados -fijado en 55 plazas- le confieren a las consellerias seis, a Les Corts otros seis, al público externo 14 y cuatro para personas de movilidad reducida.
Sin embargo, tras trasladar a los medios la intención de su grupo parlamentario -sin profundizar en las cifras- después de la Junta de Síndics de este martes, Montiel recibía un revés de Compromís. Nunca el portavoz de los nacionalistas en Les Corts, Fran Ferri, había sido tan contundente. Afirmó que su homólogo de la formación morada había faltado a la verdad ya que actualmente "no existe ninguna regulación de los invitados".
Y continuó: "Cada grupo invita a quien quiere y luego Presidencia -de Les Corts- decide" quien acude, aplicando el protocolo, que da prioridad al Consell. Por ello, a su juicio, la propuesta de Podemos lo que hacía era "limitar la presencia de gente", cuando ahora no existe ninguna limitación por parte de la Cámara ni hay cuotas para las plazas disponibles.
Con estas afirmaciones Ferri hacía referencia a una resolución de la Mesa de Les Corts del 20 de abril 2012 cuando el popular Juan Cotino era Presidente del parlamento valenciano, que es la normativa que está actualmente en vigor. Este acuerdo sobre la utilización de las salas institucionales, espacios y otras dependencias de la Cámara fija que en el acceso a la tribuna de público e invitados "tendrán prioridad las primeras autoridades, senadores en representación de la CV e invitados de carácter institucional". La resolución da prioridad también a "los altos cargos de la administración autonómica y otros cargos públicos atendiendo a su orden de prelación, así como los miembros de los gabinetes de Presidencia y las consellerias".
No obstante, la propuesta de Montiel -que él mismo definía a este diario como una especie de "enmienda"- no se refería al acuerdo vigente, sino que hacía referencia a una proposición que la Mesa de Les Corts les trasladó a los grupos el pasado 21 de junio de 2017. Un texto en el que sí se distribuían las 55 plazas reservadas en la Cámara para el público. En esta, la división del espacio respondía a que tanto el Consell, como los grupos o el parlamento valenciano tuvieran un límite de reservas: PP (7), PSOE (5), Compromís (5), Cs (3), Podemos (3), Consellerias (10), Corts (12), público general (8) y personas con movilidad reducida (2).
Así, con el Debate de Política General fijado el próximo 13 y 14 de septiembre -jornada de gran afluencia de visitantes- y a falta de discutir sobre los límites del público en el hemiciclo valenciano durante las sesiones parlamentarias, los nacionalistas y los morados chocaron por las diferentes aristas que tiene la normativa actual, la propuesta todavía no aprobada de la Mesa y la "enmienda" de Podemos. Un malentendido que generó bronca entre dos formaciones que concurrieron juntas en las elecciones generales de junio de 2016.