VALÈNCIA. El PNV ha llegado hasta el mínimo detalle en la agenda vasca, las contrapartidas que ha exigido al Gobierno de Mariano Rajoy a cambio de apoyar los PGE en el Congreso. Además de las grandes cifras del cupo o las millonarias inversiones para la Alta Velocidad, la formación nacionalista también ha conseguido aumentar las subvenciones del Estado a varias entidades culturales. Entre los compromisos arrancados al Gobierno central destaca el aumento en 100.000 millones de la transferencia prevista a la Asociación Bilbaína de Amigos de la Ópera (ABAO), que ya sumaba una golosa aportación de 517.000 euros. La jugada en el último minuto, como el gol de Messi al Real Madrid, ha dejado por comparación tocado a un Palau de Les Arts que sigue perdiendo posiciones por lo que respecta a mimos del Estado. Y eso que no es ni de lejos el Real Madrid o el Barcelona.
Con una partida de 600.000 euros, el coliseo valenciano se sitúa por detrás de los grandes contenedores de España. Sí, las comparaciones son odiosas. Así pues, este año el gobierno dotará al Teatro Real con 9,3 millones para el desarrollo de sus actividades musicales, además de otra partida adicional de 500.000 euros para la programación del 200 aniversario; mientras que el Liceo de Barcelona sumará una aportación ordinaria para sus actividades de 7,1 millones y un montante adicional de 1,4 millones para necesidades de tesorería. Pero no solo ABAO ha sido la única entidad ‘agraciada’ por Rajoy, que aumentará en 46.820 euros la partida ya existente para Euskaltzaindia (Real academia de la lengua vasca), que alcanzará los 200.000 euros, un cifra con la que también jugará la Eusko Ikaskuntza (Sociedad de Estudios Vascos), tras una subida de 70.100 euros. El resto de entidades culturales que verán engrosar su cuenta son la Quincena Musical Donostia (25.000 euros), el museo vasco de arte contemporáneo Artium (75.000 euros) y el Festival Internacional de Cine de San Sebastián (100.000 euros).
Los jugosos aumentos contrastan con los presupuestos globales de muchos de los contenedores culturales de la Comunitat. Por ejemplo, el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) cuenta este año con una partida del Gobierno central de 171.000 euros para gastos de funcionamiento, la misma cifra que le otorgó en 2016. Este último montante, sin embargo, nunca llegó a hacerse efectivo por un error administrativo que dejó sin aportación económica a la pinacoteca valenciana. La cosa se pone peor si se compara la situación del IVAM con los presupuestos que reciben otros museos como el Reina Sofía (42 millones), el Museo Thyssen-Bornemisza (más de 5 millones), el MNAC-Museu Nacional d'Art de Catalunya (más de 2 millones) o el MACBA-Museu d'Art Contemporani de Barcelona (más de 1 millón).
Si el aumento de partidas en el País Vasco ha sido generalizado, también se han sumado aportaciones hasta ahora inexistentes a distintas instituciones culturales de la región. De esta forma, el Gobierno central aportará 75.000 euros a Jakiunde, la Academia de las Ciencias, de las Artes y de las Letras del País Vasco; también dotará con 75.000 euros al Museo Marítimo de Bilbao mientras que se compromete a ingresar 100.000 euros al Valle Salado de Añana, todas estas entidades que no habían recibido en los pasados Presupuestos Generales ayudas.
Cultura mantiene sus irrisorios presupuestos frente a la debacle valenciana en los PGE
