VALENCIA. A falta de diez días para que tenga lugar la junta de accionistas del Banco Popular -y con ella el relevo de Ángel Ron por Emilio Saracho en la presidencia-, los bajistas han dado una nueva vuelta de tuerca en el accionariado de la entidad madrileña. Y lo han hecho por doble partida: estableciendo nuevos máximos históricos y con media docena de 'cortos' con DNI. Casi nada.
Nunca antes desde que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) publicara en 2010 las posiciones cortas de los valores cotizados, Banco Popular había tenido el 9,88% del capital en manos de los bajistas. Que en este caso, además, corresponden a media docena de duros huesos de roer, principalmente hedge funds o fondos de alto riesgo.
Así, y según la última comunicación quincenal del organismo supervisor correspondiente al pasado 4 de febrero, AQR Capital Management lideraba los 'cortos' con una posición del 3,16%. A continuación se dejaban ver Marshall Wace (2,59%), Samlyn Capital (1,22%), BlackRock Investment Management (0,55%), Citadel Advisor II (0,53%) y ENA Investment Capital (0,51%).
Así se explica que las acciones del 'Popu' -como se les conoce en la jerga bursátil- estén en zona de mínimos históricos. Y, por si faltaba algo, Goldman Sachs sacaba una nota ayer advirtiendo que la sustitución de Ron por Saracho al frente del banco puede traer incertidumbres en tres niveles: la posibilidad de cambios en el consejo de administración, potenciales modificaciones en el plan de negocio, objetivos y estrategia de ejecución, y la opción de realizar una nueva ampliación de capital o vender o fusionar la entidad.
Entre los riesgos a los que se enfrenta Popular este ejercicio, los expertos apuntan a la posibilidad de que el sector inmobiliario en España evolucione peor de lo esperado, que el crédito no crezca según lo previsto y/o que se produzcan cambios en la estrategia del banco con la llegada de Saracho en el primer trimestre del año.
Teniendo en cuenta estas claves, los analistas del banco estadounidense -rival de JP Morgan Chase donde Saracho dejó la vicepresidencia mundial tras aceptar el cargo en el 'Popu'-, Goldman Sachs prevé que Popular cierre el ejercicio con un beneficio neto de 603 millones de euros, frente a las pérdidas de 3.485 millones de euros presentadas en 2016.
Las previsiones del banco de inversión apuntan que la entidad podría comunicar el primer trimestre de 2017 un beneficio neto de 181 millones de euros, una cifra que se rebajaría hasta los 137 millones en el segundo trimestre. También contempla una beneficio de 174 millones de euros para el tercer trimestre y de 111 millones para el cuarto trimestre.
Mientras tanto, la entidad madrileña sigue de 'road show' mundial vendiendo sus fortalezas de la mano de Javier Moreno, director financiero, y Carlos Berastáin, director de Relación con los Inversores, que les va a llevar por las principales plazas financieras del planeta como París, Londres, Nueva York....