VALÈNCIA. (EFE). La economía de la Comunitat Valenciana acentúa la caída que se viene apuntando desde hace medio año, según la opinión de los economistas, que observan un estancamiento en los próximos seis meses e incluso un retroceso en la recuperación.
Si ahora mantienen el aprobado con un 5,32, la sensación de pesimismo se incrementa de cara a los seis meses siguientes y otorgarán un suspenso a la economía valenciana (4,96), que supone una pérdida de casi cuatro décimas, según la encuesta de coyuntura correspondiente a diciembre del Consejo General de Colegios de Economistas de la Comunitat Valenciana, presentada este martes.
La opinión sobre la economía del conjunto de España va en la misma línea aunque se sitúa al borde del aprobado con un 5,01 para los próximos seis meses, con una pérdida de casi cinco décimas respecto al 5,46 que le conceden en este momento.
Por provincias, los economistas de Valencia son los únicos que esperan mantener el aprobado dentro de seis meses, con un 5,00, ya que en Alicante y Castellón puntúan con un 4,90 y un 4,72 respectivamente la economía de la Comunitat.
Castellón también suspende a la economía española a seis meses vista, con una nota del 4,60, si bien Alicante y Valencia mantienen el aprobado, aunque con notas muy justas de 5,01 y 5,03, respectivamente.
Para el decano del Colegio de Economistas de Castellón, Jaime Querol, estos resultados indican un cambio de tendencia frente al dinamismo que reflejaban las dos últimas encuestas realizadas y revelan "un pesimismo o cautela" respecto a la evolución.
La valoración de la economía valenciana va bajando desde el 5,50 de hace un año y el 5,48 de junio al 5,32 actual, una percepción que se comparte para la economía española, que se puntúa con una nota algo superior a la regional, el 5,46.
Entre los problemas de la economía, los economistas resaltan la inadecuada dimensión y estructura de las empresas valencianas como el principal con el 57 %, después de que en la anterior encuesta (hace seis meses) superara por primera vez al paro, que se sitúa en segundo lugar (con el 53,4 %) y por detrás el déficit de infraestructura y comunicaciones (el 50,5 %).
El dato más llamativo es que la evolución de la demanda, que se mantiene como cuarto problema, ha registrado un incremento muy notable, desde el 38,45 % de hace seis meses al 49 % actual, lo que refleja una preocupación entre los economistas.
Los siguientes problemas se sitúan muy lejos de los primeros cuatro: los costes laborales, el precio de los combustibles y la escasez en el abastecimiento de agua.
Sobre las medidas que pueden adoptarse a partir de las negociaciones que tienen lugar para los Presupuestos del Estado de 2019, como el aumento del salario mínimo, el incremento del tope de cotizaciones o un tipo mínimo en el impuesto sobre sociedades, consideran que sus efectos no serán notables en la demanda interna y las finanzas públicas y objetivos de déficit.
Se muestran escépticos en la introducción de estas medidas -y otras como una tasa sobre transacciones financieras, el aumento del impuesto sobre el gasóleo o el IRPF de las rentas más altas- y en ningún caso consideran que tendrán efectos positivos.
El decano del Colegio de Economistas de Valencia, Juan José Enríquez, ha señalado que la incertidumbre siempre es negativa para la economía, en referencia a la aprobación de los Presupuestos o su prórroga.
Respecto al resultado de las elecciones andaluzas y el avance de Vox, el decano de Alicante, Francisco Menargues, ha considerado que es pronto para opinar sobre los efectos en la economía, y el decano de Valencia ha afirmado que no parece que un posible pacto entre fuerzas políticas fuera a darle demasiado peso a este partido en cuanto a decisiones económicas.
Entre las preguntas a los economistas figura la venta de armas a Arabia Saudí y los embargos a este país por la muerte de un periodista en el consulado de Estambul, sobre la que la mayoría opina que hay que ponderar adecuadamente el daño causado y que la ética es irrenunciable y no se deben vender armas.
La encuesta ha sido realizada a 861 profesionales colegiados de la Comunitat Valenciana del 8 al 21 de noviembre a través de un cuestionario.