VALENCIA. La transición hacia el mercado digital y los servicios de streaming no solo es cuestión de tiempO, también de beneficios. Los datos publicados por la consultora PwC no dejan lugar a la duda y prevén de cara al año 2019 un aumento generalizado en los medios de comunicación e industria del entretenimiento 2.0 en el territorio nacional.
El crecimiento medio anual compuesto (CAGR) será de un 3,9% en los próximos cuatro años, hasta situarse en los 26.210 millones, un porcentaje que se dispara en el caso de las suscripciones de vídeo bajo demanda (SVoD), uno de los servicios al que más le ha costado calar entre los usuarios españoles pero que, finalmente, parece llegar para quedarse gracias a la “paquetización” de diferentes productos audiovisuales. En el caso concreto de las SVoD, los ingresos subirán un 38% al año, pasando de 15 millones de euros en 2014 a 75 millones en 2019, primer curso en el que la compra online superará al alquiler físico, cuyo negocio perderá ocho puntos porcentuales por año.
Pero el futuro no solo pasa por cómo consumir, sino también por el qué. “Si hasta hace tres años los operadores de telecomunicaciones solo aportaban la facilidad técnica para consumir contenidos, ahora apostarán por generarlos como valor estratégico dentro de su oferta de servicios”, explica Virginia Arce, responsable del sector de Telecomunicaciones, Tecnología, Entretenimiento y Medios de Comunicación en PwC.
En el poso de todo este entramado: la reconversión del mercado publicitario en un escenario en el que la población nativa digital “ya será mayoritaria en nuestro país a partir del año 2020”. También la industria discográfica da la vuelta a la tortilla, con un aumento en los ingresos en el ámbito de la música digital del 10% anual (103 millones en 2019) y un descenso de seis puntos en los distintos formatos físicos (64 millones en 2019). En el caso de los conciertos, tanto por venta de entradas como por patrocinios, las ganancias se mantendrán estables.
En cuanto a la prensa, el ‘Entertainment and Media Outlook 2015-2019’ destaca la caída de cuatro puntos en los ingresos por publicidad en prensa impresa, frente al aumento del 11% en digital. Los libros de consumo acusan más la diferencia con un descenso de las ganancias de 5% en el caso de los impresos o en audio frente a una subida del 28% en los electrónicos.