VALÈNCIA. Los espacios de coliving siguen ganando peso en València. El teletrabajo, la facilidad en la movilidad entre ciudades y los nuevos hábitos de vida han propiciado que surjan nuevas soluciones alojativas que den respuesta a esas necesidades. Así lo demanda el mercado y lo han entendido las empresas, que se han lanzado a promover este tipo de formatos, que aúnan zonas privativas con áreas comunitarias. Un auge que no deja de crecer en plazas como la valenciana, en donde son varios los proyectos que están en marcha. Y ahora habrá uno más. Grupo Gimeno se suma a esta tendencia con un espacio de coliving de 50 plazas en el Cabanyal.
La empresa, a través de la sociedad Marina Living SLU, ya ha presentado la solicitud para la licencia ambiental, que se estudia en el consistorio valenciano. Se trata de un paso previo para conseguir el permiso de obra y construir este inmueble en el barrio marítimo del 'cap i casal'. Concretamente, el edificio se ubicará en tres parcelas, aunque su entrada se ha proyectado en San Pascual, 23.
En la primera y segunda planta estarán el resto de estancias, además de cinco espacios comunes como zona de estar, cocina y comedor. En total, se han diseñado 22 dormitorios por piso. El sótano se ha reservado para almacenes y cuartos técnicos, aunque también habrá una lavandería para el uso de los residentes.
Un nuevo proyecto que viene a completar las áreas de negocio del grupo castellonense. Hace unos años que se alió con la valenciana White Investing y constituyeron la sociedad Nomadom Cospaces para la gestión de espacios de colivig y coworking. Por ahora, tienen un primer activo en Russafa, un centro de trabajo flexible de más de 1.000 metros cuadrados para albergar a más de 150 usuarios. Su concepto, según explicaron entonces, era generar "espacios abiertos, dinámicos y flexibles, situados en ubicaciones premium".
Lo cierto es que el coliving es un formato que toma posiciones en España. Su modelo se basa en la idea de generar 'comunidad'. De esta forma, esta solución se suele promover sobre suelo de uso residencial en el centro de las ciudades. Los edificios, que pueden ser de nueva planta o rehabilitados, cuentan con varias zonas comunes como gimnasio, piscina o coworking y habitaciones privadas, equipadas con cocina.
Además, es una solución que permite aliviar la falta de oferta en alquiler que sufren muchas ciudades sacando nuevo producto al mercado. De media, la renta mensual ronda los 900 euros en ciudades como València, ya que, además de la parte alojativa, se incluye el uso de todos sus servicios, así como suministros de agua, luz o limpieza, entre otros.
Una alternativa que ha llegado con fuerza al 'cap i casal' con varias iniciativas. Este es el caso del proyecto de la compañía vasca Kategora, que levanta un complejo de 316 habitaciones también en el Cabanyal. Un proyecto que cuenta con una inversión de 36 millones de euros. Pero no es el único. Urban Campus, ya tiene operativo en València su primer coliving de obra nueva en España. Se trata de un edificio con 41 estudios y más de 200 m2 de zonas comunes en el barrio de Ayora. Cuenta con gimnasio, coworking, sala de cine, cocina comunitaria con zona de comedor y salón, lavandería y, en la azotea, barbacoa, duchas y chill out.
Además, empresas como Aticco Living ultiman su aterrizaje en la ciudad. La gestora catalana, especializada en espacios de 'coliving', negocia la puesta en marcha de tres proyectos en la ciudad, con más de 300 habitaciones en total, para atender la alta demanda de nómadas digitales y profesionales desplazados que buscan este tipo de modalidad alojativa para residir en la ciudad.
Otros proyectos, en cambio, están en fase más embrionaria como el de la valenciana 4wanders, que promueve un coliving con 45 apartamentos y una nave anexa que destinarán a un coworking en pleno barrio de la Zaidía en la ciudad.