VALÈNCIA. Las elecciones europeas celebradas este domingo, al margen de los resultados en el ámbito nacional, también dejaron datos interesantes para los principales partidos en la Comunitat Valenciana. Tal y como había informado este diario, aunque los resultados de estos comicios son difícilmente extrapolables a las citas con las urnas más recientes, existían posibles lecturas de los resultados este 9J en el marco autonómico que ofrecerían pistas sobre el estado de salud de las distintas fuerzas políticas un año después de las autonómicas y las generales.
Así, puede decirse que el presidente de la Generalitat y líder del PPCV, Carlos Mazón, cumple con su papel de favorito y sale reforzado de estas elecciones, que coincide con el primer aniversario de su gobierno con Vox como socio en el Consell. 705.000 votos, un 35,8% de las papeletas, lo que supone un ligero ascenso respecto a las generales, donde consiguió un 35,1%. Además, el porcentaje conseguido se sitúa 1,6 puntos por encima de la media del PP en España, que se quedó en el 34,2%.
Ahora bien, este buen resultado de los populares en la Comunitat no implicó, ni mucho menos, una noche aciaga en el lado del eterno rival, el PSPV-PSOE. Los socialistas liderados por Diana Morant suman 618.000 votos, lo que viene a representar el 31,4% de los sufragios, un descenso de 1,3 puntos respecto a las generales. Eso sí, el resultado en tierras valencianas de los socialistas también estuvo por encima de la media nacional del PSOE, uno de los principales objetivos de Morant y los suyos. En concreto, 1,2 puntos de diferencia respecto al 30,2% que extrajo la formación socialista en España.
De esta manera, las dos fuerzas con más representación en la Comunitat tenían motivos en la noche de este domingo para estar satisfechas. Mazón, no sólo no ha percibido desgaste de su pacto de gobierno con Vox en el primer año de gestión, sino que puede 'vender' su resultado como una manera para seguir consolidando su rol de barón autonómico en la estructura del PP. Bien es cierto que, especialmente en la precampaña, cuando los sondeos ofrecían mejores perspectivas generales para los populares, también se acariciaba la idea en el entorno del presidente de la Generalitat de asestar un golpe electoral a la nueva líder del PSPV, Diana Morant, especialmente por ostentar también el papel de ministra en el Gobierno de Sánchez. No obstante, los socialistas valencianos han resistido el embate, por lo que anoche, aunque existía satisfacción por el resultado, no había una alegría plena.
En cuanto al PSPV, el resultado se leía como una primera prueba superada para Morant. Esta cita con las urnas aleja los fantasmas de un posible desplome tras los cambios internos del partido y el primer año del gobierno del PPCV. Para los socialistas valencianos, el veredicto de los comicios valida el discurso de oposición planteado hasta ahora y la defensa a ultranza de Sánchez, por lo que en el cuartel general del PSPV se hacía anoche un buen balance del resultado, dado que a juicio de los socialistas les deja en una posición óptima para luchar de tú a tú con el PPCV en la legislatura.
Por lo que respecta a Vox, el partido de Santiago Abascal volvió a demostrar que en la Comunitat Valenciana posee un predicamento superior al de otras autonomías. Su resultado, más de 226.000 votos y un 11,5% de las papeletas, se sitúa casi dos puntos por encima de la media nacional, que se quedó en 9,6%. Ahora bien, un resultado muy inferior al 15,8% logrado en las pasadas generales en la Comunitat, que también superaba al balance estatal, que fue de 12,8%. Probablemente, la pérdida de porcentaje de Vox pueda tener relación con la irrupción de la agrupación de electores 'Se acabó la fiesta' (SALF) liderada por Alvise Pérez, de corte populista, que en la Comunitat ha logrado un 5,7% de los votos, 1,2 puntos más que en el resto de España.
En cuanto Compromís-Sumar, agridulce resultado para la coalición valencianista. Los tres eurodiputados conseguidos permiten al exconseller Vicent Marzà lograr el escaño en Bruselas, pero el balance para el partido matriz de la alianza liderado por Yolanda Díaz no es positivo. Compromís, con 150.000 votos y un 7,6% de los votos (frente al 4,6% de Sumar en el ámbito nacional), se ha reivindicado como un puntal para los de Díaz, pero a buen seguro este resultado también dará paso a un proceso de reflexión de los valencianistas sobre la conveniencia o no si seguir caminando de la mano de un proyecto que no parece terminar de arrancar.