El presidente de la Diputación de Valencia y alcalde de Ontinyent (Valencia), Jorge Rodríguez, apuesta por ir "hacia un modelo federal" del Estado para que cada territorio, sin depender de otros, decida el futuro de sus diputaciones. Rodríguez ha considerado que las tareas que tienen asumidas estas instituciones son "esenciales" pero ha opinado que "podrían darse desde otras entidades" y se ha mostrado a favor de la desaparición progresiva de estas entidades con el correspondiente traspaso de personal y partidas económicas.
El responsable provincial se ha pronunciado de este modo en el desayuno informativo que ha ofrecido junto a la vicepresidenta de la Diputación, Maria Josep Amigó, preguntado por el futuro de estas instituciones y por las declaraciones del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que se ha decantado por mantener las instituciones provinciales teniendo en cuenta que "vertebran" el territorio.
"Defiendo que han de desaparecer pero estoy aquí como presidente de una diputación que presta servicios esenciales para los municipios", ha indicado, al tiempo que se ha mostrado a favor de contar con "una carta de servicios" de estas entidades que sea conocida por los ciudadanos y por las instituciones. Ha apuntado así la necesidad de tener determinar esas competencias pero ha reiterado que podrían ser ofrecidas por otras administraciones.
El responsable provincial ha manifestado, en ese sentido, que "lo esencial es que se presten esos servicios" y no tanto "quién los presta". "¿Es necesario que los preste exactamente la Diputación?", ha preguntado Rodríguez, que a la vez ha apuntado que "quizá se podrían prestar desde organismos más próximos como las mancomunidades y con menos coste".
En esa línea, se ha mostrado partidario de "iniciar el proceso de transferencias" desde la corporación provincial, "no sólo de cosas que tiene la Diputación y que deberían ser de la Generalitat, como el psiquiátrico de Bétera, sino de otras que por criterios de eficacia sería mejor que ofrecieran las mancomunidades".
Jorge Rodríguez ha señalado que "es necesario ir hacia un modelo federal" para que "cada territorio se organice territorialmente sin necesidad de depender de otros" y decidir sobre el futuro de sus diputaciones. Así, ha reiterado que en el caso de "la Comunitat Valenciana la tarea de las diputaciones es esencial" aunque "podrían darse desde otros organismos" con la correspondiente transferencia también de personal y recursos económicos.
Por su parte, la vicepresidenta de la institución provincial ha indicado, preguntada por cómo compagina este cargo con la postura de su partido de suprimir estas entidades, que considera que se trata de organismos "caducos" que es "necesario eliminar". Ha indicado que ésta es una opción que "todos los partidos, menos el PP, llevaban en su programa electoral".
Maria Josep Amigó ha asegurado que asume las responsabilidades que tiene como vicepresidenta de la Diputación de Valencia, pero ha apostado por ir transfiriendo paulatinamente sus competencias y por "ir cambiando las cosas desde dentro".
"Yo estoy contenta con la responsabilidad que tengo con los ciudadanos. Tenemos seis diputados provinciales en la corporación y es necesario asumir esas responsabilidades. Las cosas se han de cambiar desde dentro. Cuando pasen cuatro años, la Diputación seguirá pero con menos competencias de las que tiene ahora", ha planteado.
De esta manera, Amigó ha defendido el traspaso de competencias desde la institución provincial a "las mancomunidades y la Generalitat". "No cerramos porque la ley ni lo permite. Entiendo que las competencias son perfectamente prescindibles. Las responsabilidades y funciones las podrían hacer las mancomunidades, los ayuntamientos o la Generalitat", ha insistido.
La vicepresidenta, que ha señalado que en ese caso la Diputación pasaría también a su personal, ha afirmado que el presupuesto de la corporación provincial para 2016 las mancomunidades contarán con más presupuesto para asumir nuevas tareas. "Ya se está intentando hacer pasos", ha dicho.
Por otro lado, preguntados por si el nuevo equipo de gobierno de la Diputación de Valencia ha encontrado "muchas cosas en los cajones" del anterior gobierno, el presidente de la institución ha indicado que "aún" se está en esa fase de revisión. "La casa es grande y hay muchos cajones", ha señalado.
Jorge Rodríguez ha subrayado el "cambio de tendencia" en la forma de gobernar con la entrada de su equipo y ha mostrado su disposición de "cooperación absoluta" con la justicia en todo lo que se está investigando sobre la gestión de la empresa pública Imelsa. "Nos hemos encontrado con cosas sin sentido" y "decisiones absurdas", ha declarado, a la vez que ha reiterado su rechazo al "clientelismo" y el "enchufismo". "Eso ya ha pasado", ha afirmado.
Ha considerado que aún quedan cosas por conocer y ha declarado, respecto a Imelsa, que "el streptease integral" lo darán a conocer los jueces cuando se conozca el resultado de toda la investigación abierta. Por su lado, Maria Josep Amigó ha indicado que "aún no sabemos hasta dónde se ha llegado" y que habrá "sorpresas".
El responsable provincial ha criticado que las instituciones se usen "como herramienta política para la lucha partidista cuando han de estar por encima y no convertirse en el brazo armado de un partido" y ha censurado proyectos como "TeleRus".
"Nos hemos encontrado con una forma de actuar que no nos gustaba. El cambio de actitud con la gente ya es importante", ha aseverado la vicepresidenta, que ha expresado también su voluntad de "colaborar con la justicia para que todo se esclarezca".