CASTELLÓ. Vuelta a la mesa de negociaciones para el despido colectivo en seis empresas del grupo Altadia. Sindicatos y empresa se han dado una nueva oportunidad para alcanzar un acuerdo sobre el ERE planteado por las seis firmas del conglomerado esmaltero después de que la pasada semana, el 25 de enero, expirara el período de consultas y quedaran rotas las conversaciones sin acuerdo.
Sin embargo, pese a las importantes diferencias existentes entre ambas partes, han acordado retomar la negociación con una nueva reunión, prevista el próximo lunes a las 16.00 horas. Un extremo que confirmaron tanto sindicatos como fuentes de la compañía, según los cuales se ha decidido extender el período de negociaciones para alcanzar un pacto, cuanto antes mejor.
De algún modo, un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) aplicado sin acuerdo no es el escenario más deseable ni para las centrales sindicales ni para las compañías. Para los representantes de los trabajadores, la falta de un pacto da vía libre a las empresas para poner en marcha un despido de 285 personas como estaba previso inicialmente, y no las 185 que constaba en la última propuesta antes de la ruptura de las negociaciones. Además de implicar las condiciones mínimas marcada por la normativa.
Por parte de la representación del grupo, llevar a cabo un despido colectivo de manera unilateral puede suponer que el conflicto laboral se enquiste y que los sindicatos acaben judicializándolo, con la demora que ello conlleva. No en vano, las organizaciones sindicales rechazaban el despido colectivo de plano porque no reconocen la motivación de la empresa, que achaca el ERE a causas económicas, productivas y organizativas a causa de la crisis que atraviesa el clúster azulejero.
En ese sentido, los sindicatos creen que las causas alegadas por el grupo esmaltero no son reales y obedecen exclusivamente a una decisión empresarial, por lo que ya habían avanzado a los trabajadores su intención de frenar el ERE con "informes contradictorios" para intentar el bloqueo por parte de la administración.
En la vuelta a la mesa de negociación, ambas partes deberán hacer frente a las importantes diferencias que quedaron sobre la mesa. Por parte de Altadia, la compañía aseguró que había tenido "en todo momento una firme voluntad de reducir el número de despidos y, de hecho, en sus planteamientos se ha acercado considerablemente a las demandas de los sindicatos, pero aún así, todas las propuestas han sido rechazadas por la comisión negociadora".
Sin embargo, los sindicatos rechazaron supeditar el acuerdo sobre el ERE a cuestiones salariales y laborales de la plantilla que no quedará afectada, y acusaron a la compañía de intentar supeditar el pacto sobre el ERE a, por ejemplo, la no aplicación de la subida salarial del 10,3% a partir de este mismo mes de enero.
