VALÈNCIA (EP). El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha mostrado "horrorizado" por la muerte de siete trabajadores de la ONG World Central Kitchen el chef español José Andrés, a quien ya ha trasladado personalmente su pésame así como el apoyo del Ejecutivo.
"Vuestra solidaridad, altruismo y compromiso con los que más lo necesitan es un orgullo", ha manifestado Sánchez, quien precisamente se encuentra de gira en la región, en un mensaje en X, antiguo Twitter.
"El Gobierno de España está con vosotros", ha asegurado el presidente del Gobierno, que ha indicado que ha trasladado personalmente a José Andrés su "más sincero pésame" así como su "cariño y apoyo para él y su equipo".
En términos similares se ha pronunciado el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. "Horrorizado por la muerte de trabajadores World Central Kitchen en Gaza mientras entregaban comida", ha escrito en la citada red social.
Por otro lado, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha trasladado este martes su "sentido pésame" al chef español José Andrés y a todo su equipo de la ONG World Central Kitchen (WCK) "por la trágica muerte de cooperantes mientras trabajaban, como siempre, ayudando a los demás". La dirigente madrileña ha compartido estas palabras en su cuenta personal de 'X'
El jefe de la diplomacia, que también ha conversado con José Andrés para hacerle llegar su "solidaridad" así como el respaldo de España a la labor que realizan, ha ido un paso más allá y ha exigido una vez más el cese de las hostilidades en Gaza. "Exigimos alto el fuego y entrada ayuda humanitaria", ha reclamado.
Al menos siete trabajadores de WCK murieron este lunes por la noche en un bombardeo del Ejército de Israel contra su vehículo en la gobernación de Deir al Balá, en el centro de la Franja de Gaza, en el marco de la ofensiva israelí contra el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Entre los fallecidos hay un ciudadano británico, uno polaco, uno australiano, dos con la doble nacionalidad estadounidense y canadiense, y otro palestino, según la propia organización. "El equipo de WCK viajaba en una zona de distensión en dos coches blindados con el logotipo de WCK y un vehículo de revestimiento blando", reza un comunicado de la ONG.
La organización ha explicado que el convoy, alcanzado al salir de un almacén tras descargar 100 toneladas de alimentos, estaba coordinado con el Ejército israelí. "No es sólo un ataque contra WCK, es un ataque contra las organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más terribles, en las que los alimentos se utilizan como arma de guerra. Es imperdonable", ha declarado la directora ejecutiva de World Central Kitchen, Erin Gore.
Tras ello, World Central Kitchen ha anunciado la suspensión inmediata de sus operaciones, y ha asegurado que "pronto" tomarán decisiones sobre el futuro de su trabajo.
Por otro lado, el fundador de Proactiva Open Arms, Óscar Camps, ha denunciado este martes "el vacío irreparable" tras el bombardeo del Ejército de Israel contra un vehículo en el que se encontraban varios trabajadores humanitarios de la ONG World Central Kitchen, fundada por el chef español José Andrés, y que se ha saldado con al menos cinco personas, entre las que hay cuatro voluntarios extranjeros y un conductor palestino.
"Estamos aquí porque nos dolían las muertes de los civiles en Gaza, ahora también el vacío irreparable que deja la pérdida de nuestros compañeros de equipo de World Central Kitchen", ha manifestado a través de su perfil en la red social X, anteriormente conocida como Twitter.
La ONG ha señalado horas antes que este ataque se trata de "una tragedia" y ha subrayado que "los trabajadores de ayuda humanitaria y los civiles nunca deben ser un objetivo".
José Andrés, que se ha mostrado "desconsolado y afligido", ha pedido a Israel "parar las matanzas indiscriminadas" después de que WCK perdiera a varios de sus "hermanos y hermanas en un ataque aéreo de las Fuerzas de Defensa de Israel". También ha instado a las autoridades israelíes a "dejar de restringir la ayuda humanitaria" hacia el enclave, a parar "de matar a civiles y cooperantes" y a "dejar de usar los alimentos como arma".
El Ejército de Israel ya ha anunciado la apertura de una "investigación en profundidad" de los hechos y ha recalcado su "cooperación y coordinación" con la ONG "con el fin de apoyar sus esfuerzos para proporcionar alimentos y ayuda humanitaria a los residentes de la Franja de Gaza".
Además, el Gobierno Reino Unido han expresado este martes su "preocupación" por la muerte de siete trabajadores de la ONG World Central Kitchen (WCK), entre ellos una persona de nacionalidad británica, tras bombardear Israel el vehículo en el que viajaban.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ha confirmado que están al tanto de la información de que entre los fallecidos se encuentra una persona británica, pero que están a las espera de "más información", según ha dicho un portavoz.
Por su parte, en declaraciones a la BBC, la ministra de Educación, Gillian Keegan, ha señalado que el Gobierno británico se encuentra "muy, muy preocupado", si bien ha dicho que aún están a la espera de confirmación.
"Aún no nos lo han confirmado", ha dicho Keegan, quien ha recordado que el Gobierno británico ha instado a Israel "a hacer más para proteger a los civiles", pero al mismo tiempo permitir la entrada de ayuda humanitaria en Gaza.
Asimismo, ha lamentado que estos hechos hayan provocado que la organización fundada por el cocinero español José Andrés suspenda sus operaciones en la Franja de Gaza. "Una de las claves es intentar que llegue más ayuda a Gaza, así que (...) obviamente es muy preocupante", ha dicho.
Además del ciudadano británico entre los muertos hay un polaco, un australiano, dos con la doble nacionalidad estadounidense y canadiense, y un palestino, según ha confirmado WCK, que ha calificado lo ocurrido de "imperdonable".
Australia, a través de su primer ministro, Anthony Albanese, ha pedido explicaciones al Gobierno de Israel y ha exigido una "plena rendición de cuentas, al igual que la Casa Blanca que ha reclamado una "rápida investigación" de lo ocurrido, mientras que Polonia se ha limitado a expresar su desacuerdo con "el incumplimiento del Derecho Internacional Humanitario".
El comisionado general de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, se ha mostrado "devastado" por el bombardeo israelí que ha provocado la muerte de siete trabajadores de la ONG World Central Kitchen y ha enfatizado la labor de esta ONG, que ayuda "a una población que se muere de hambre".
"Mis profundas condolencias a WCK y a las familias de los que han muerto", ha expresado Lazzarini en redes sociales, con una alusión al fundador de la ONG, el chef español José Andrés. El jefe de la UNRWA ha recordado además que el personal humanitario nunca puede ser objetivo de ataques, ni siquiera en situaciones de conflicto.