VALÈNCIA (EFE). El Partido Popular y Vox, socios de gobierno en el Ayuntamiento de València, han acordado convocar un pleno extraordinario para la próxima semana para "defender el marco constitucional" y posicionar al consistorio como una administración local contra la amnistía.
Así lo ha anunciado la alcaldesa de València, María José Catalá, quien ha propuesto la convocatoria de este pleno tras conocer la firma del pacto este jueves entre Junts y el PSOE.
Ambos grupos firmarán este viernes la convocatoria de celebración de un pleno extraordinario la semana que viene en el que posicionarán al Ayuntamiento como "una de las administraciones locales más importantes de España contra la amnistía" y contra "todo lo que está pasando en este país, que está generando una preocupación social bastante elevada", ha dicho Catalá.
"Hemos decidido convocar un pleno extraordinario del Ayuntamiento de València porque nuestro compromiso con la Constitución ha sido, es y seguirá siendo firme y contundente", ha señalado Catalá, que ha exigido respeto a la democracia, que "se ve hoy vulnerada por un acuerdo que rompe todos los principios de igualdad ante la ley y sometimiento a la misma".
En el pleno se irá más allá de una mera declaración institucional ya que se hará un posicionamiento claro a favor de la Constitución Española y del marco de convivencia y en contra de la amnistía, ha subrayado.
Según Catalá, "queremos que los vecinos de València sepan quién están con ellos y con la unidad de España y quienes están con una minoría independentista que está rompiendo nuestro país".
Sobre las protestas en contra de la amnistía, Catalá ha insistido en que el PP, con ella entre sus principales representantes públicos, se concentró de forma "pacífica, cívica y tranquila" el domingo pasado en València en un acto en el que participó el líder del partido, Alberto Núñez Feijóo, y lo volverá a hacer de la misma forma este domingo a las 12 horas frente a la Delegación del Gobierno.
Esa es "la dinámica del Partido Popular, la sensatez" pero hay mucha gente que quiere salir a la calle para expresar su disconformidad y "eso hay que entenderlo" en una democracia, según ha manifestado.
La alcaldesa ha reiterado su condena a cualquier tipo de violencia y acto vandálico frente a cualquier sede de un partido político o administración, y ha asegurado que las concentraciones pacíficas y cívicas son "una cosa bien distinta" y ha advertido al PSOE de que se equivoca si acusa al PP y Vox, pues son protestas de carácter social y a ellas acuden personas que no son afiliadas ni simpatizantes de estos partidos.