La presidenta del TSJCV, Pilar de la Oliva, con el presidente del Congreso, Carlos Fornes, miembros de la junta directiva de la Asociación de Derecho Sanitario de la Comunidad Valenciana y Carmen Puerto, directora del Palacio de Colomina CEUVALÈNCIA. Más seguridad para atajar la violencia que sufren médicos, enfermeros y celadores. Esta ha sido la principal reclamación de los profesionales sanitarios y los abogados que han participado en el I Congreso de Derecho Sanitario de la Comunidad Valenciana celebrado este jueves y viernes en València.
La segunda parte de este congreso ha estado centrada, según han informado los organizadores, en el "alarmante aumento de las agresiones a los profesionales sanitarios".
Juan José Tirado, presidente Colegio de Enfermería de Valencia, ha solicitado disponer de servicios de alarmas, “similares a los botones de la teleasistencia de Cruz Roja” que permitan dar aviso de una agresión, así como la instalación de cámaras, principalmente, en los servicios sanitarios con más agresiones. "Las medidas de prevención son fundamentales para atajar la violencia", ha añadido el representante de los enfermeros, quien ha abogado por potenciar la educación y humanizar los centros sanitarios.
El abogado David Soler ha coincidido en la necesidad de aumentar las medidas de seguridad "en centros con alto índice de agresiones, como poner alarmas y botones de pánico así como establecer una comunicación directa con la policía para que se actúe rápidamente al detectarse una agresión". El letrado ha resaltado dos realidades: el alto índice de condena en caso de agresiones denunciadas y la eficiencia de llevar estas situaciones a los tribunales ya que se logra "que el agresor no reincida".
El fiscal de la Audiencia Provincial de Valencia Joaquín Ramón Baños ha lamentado el "importante nivel de violencia que hoy existe en cualquier ámbito". En concreto, en el sanitario, ha comentado que no se denuncian todos los casos, "lo que genera impunidad".
Junto a las agresiones, el otro tema que se ha tratado este viernes en el Congreso ha sido el de las novedades jurisprudenciales. María Dolores Hernández, magistrada de la Audiencia Provincial de Valencia, ha repasado qué es la imprudencia médica y ha matizado que existen muchas reclamaciones médicas pero "muy pocas sentencias condenatorias en el ámbito penal". La responsabilidad penal no es muy común en el ámbito médico-sanitario, "pero sí muy grave y que afecta especialmente ya que muchas veces inhabilita para el ejercicio de la profesión", ha asegurado la magistrada.
La presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, Pilar de la Oliva, ha clausurado el Congreso felicitando a la organización por la elección de los temas y los ponentes, con temas como la responsabilidad patrimonial sanitaria, el nuevo baremo y su aplicación en la responsabilidad civil patrimonial sanitaria.
"Es importante que los profesionales que de alguna manera formamos parte de este sector, hagamos aportaciones sobre problemas comunes. La pluralidad es positiva para enriquecernos", ha concluido De la Oliva, quien ha señalado el éxito de este primer congreso y ha deseado que haya "muchas más ediciones".
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