Puig acusa de "recentralización" al Gobierno y urge a reconocer la diversidad territorial

BARCELONA/VALENCIA (EP/VP). El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha acusado este martes al Gobierno central de una "recentralización" y ha urgido a reconocer la diversidad territorial en un Estado federal.

"Las elites centralistas han resucitado" en los últimos años favorecidas por la crisis y el Gobierno del PP, ha asegurado en una conferencia en Barcelona, en la que también ha alertado de que estas elites han culpado de todo a las autonomías.

A juicio de Puig, esta estrategia ha fomentado la desunión entre los territorios: "Es urgente la reforma territorial para que ni en Cataluña ni en el resto del Estado fructifique la desafección y el enfrentamiento".

"También el problema valenciano"

Ha defendido que "existe un problema territorial más allá de Cataluña [...] también existe el problema valenciano", y que la mejor manera de abordarlo es con el diálogo entre instituciones y una reforma constitucional federal.

Esta reforma debe abordar cuanto antes la sostenibilidad y garantía de las pensiones, el déficit comprometido con Europa, el mercado de trabajo, la reforma territorial, la financiación autonómica y las mejoras en infraestructuras, según él.

Una de estas infraestructuras es el Corredor Mediterráneo, cuyas comunidades implicadas -Cataluña, Comunitat Valenciana, Murcia y Andalucía- representan cerca de la mitad de la población española, el 47% del tejido productivo, aportan el 45% del PIB, y sus puertos canalizan cerca del 78% del tráfico de mercancías.

Pese a eso, según él, el Estado tiene esta infraestructura en estado de "anemia" y no lleva a cabo las aportaciones generales, algo que ha favorecido que la Comunitat Valenciana y Cataluña estrechen relaciones y hagan frente común.

Esfuerzo de autonomías y municipios

Para Puig, la falta de acción del Estado contrasta con la gestión y el esfuerzo de los ayuntamientos y las comunidades, quienes están garantizando el Estado del bienestar: "Por fin, tras 30 años, se ha constatado la importancia del Estado autonómico".

Ha defendido la tarea del Consell que lidera, que ha logrado incrementar el PIB, las exportaciones, el turismo y la industria, y lo ha contrapuesto al "mal intervencionismo" que llevaba a cabo el PP.

Puig también se ha referido a la situación política y ha advertido de que la falta de un gobierno central bloquea el impulso de las reformas necesarias.

"El peor de los gobiernos posibles puede facilitar avanzar en cosas fundamentales", más aún cuando se puede contar con una mayoría progresista entre los diputados, ha añadido.