Puig califica de "históricas" las Fallas de 2017 y apuesta por "limitar la competencia desleal" en el sector

VALÈNCIA (EP). El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha tildado como "históricas" las Fallas de 2017 que culminan este domingo con la 'cremà' que "demuestra que a partir de mañana habrá un nuevo renacer". Para próximas ediciones, ha apostado por "limitar la competencia desleal" en el sector fallero e "intentar que la autenticidad no se pierda".

Puig ha valorado en estos términos las primeras fiestas josefinas con el sello de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en declaraciones a los medios de comunicación tras disfrutar en el balcón consistorial de la última 'mascletà' que ha brindado Hermanos Caballer en la plaza del Ayuntamiento y ha calificado de "magnífica".

A la mascletà también han asistido los embajadores de Corea, Japón, Tailandia, China e Italia. 

Tras destacar el "grandísimo nivel" de los espectáculos pirotécnicos de este año, el 'president' ha manifestado que "estamos ante unas Fallas históricas porque se afrontó la dificultad y los artistas hicieron un sobreesfuerzo ante el mal tiempo". "Trabajaron duramente y no te dabas cuenta de lo que había pasado" en los monumentos, ha subrayado.

Una vez superadas las previsiones meteorológicas y con "un tiempo magnífico" en las últimas jornadas, Puig ha celebrado que "más de un millón de personas" han visitado València durante toda la semana.

"Hoy es un día que tiene esa connotación triste: da pena por las fallas, pero es que las Fallas son eso: el ciclo de la vida", ha reivindicado, para ilustrar que "por eso, cuando se explica a quien viene de fuera se le dice que si no se queman no habría renacimiento: A partir de mañana empieza un nuevo renacer".

"Proteger a los falleros"

En cualquier caso, el jefe del Consell ha insistido en que las Fallas "son mucho más que unas fiestas" y que "es evidente que generan una economía" a su alrededor. Por ello, se ha mostrado partidario de "proteger a los falleros y sus empresas" para así "fortalecer su profesión".

Como medidas concretas para próximas ediciones, ha avanzado su intención de, desde la Generalitat, "intentar limitar la competencia desleal" y hablar con los falleros "con consenso y acuerdo". En definitiva, "intentar que la autenticidad no se pierda porque sino las Fallas no tendrían mucho sentido".

Preguntado por la mayor implicación del Gobierno autonómico que reclaman los presidentes de Sección Especial, Ximo Puig ha recordado que este año el Consell ha entregado premios para las fallas del conjunto de la Comunitat y ha recalcado que "hay más de 140 municipios que hoy están en fallas".

"Evidentemente, las de València tienen una consideración especial, pero, en cualquier caso, hay que atender la visión general. Por eso se ha intentado superar una cierta anomalía histórica: no se daba ningún premio que reconociera al resto de municipios y se han aumentado y queremos aumentar nuestro compromiso", ha aseverado.

Mediante estos galardones, el Gobierno valenciano ha repartido a las fallas ganadoras de todas la Comunitat un total de 150.000 euros, con máximos de 5.000 para el artista fallero y otros 5.000 para la falla.