VALENCIA. El candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, repetirá visita en tierras valencianas este miércoles tras su estancia la pasada semana en el Cap i Casal, en la que firmó un compromiso con el jefe del Consell y líder del PSPV, Ximo Puig, atendiendo reivindicaciones valencianas.
No obstante, en esta ocasión no gozará de la compañía del secretario general de los socialistas valencianos en el acto que ha previsto en la Casa de Cultura de Burjassot. Un evento organizado, según fuentes del partido, por la dirección provincial capitaneada por José Luis Ábalos, en el municipio curiosamente donde la consellera de Sanidad, Carmen Montón, creció políticamente.
La no coincidencia de ambos líderes se debe, al parecer, a desajustes irresolubles en la agenda política. Así lo confirmaron a este diario fuentes del entorno de Puig, que explicaron que el jefe del Consell tenía adquiridos compromisos previos de sensible importancia en la provincia de Alicante.
Así, Ximo Puig acudirá a la presentación de los cursos de verano de la Universidad de Alicante que se impartirán en Ciudad de la Luz y, posteriormente, asistirá a la toma de posesión del rector de la UA. Además, está programado que el jefe del Consell acuda después a un acto fijado con el alcalde de Elche, Carlos González.
Indudablemente, la pregunta que surge es si ambos líderes o sus equipos no podían haber coordinado esta cita para coincidir en el acto celebrado en Burjassot aprovechando la aparente reconciliación pública que tuvo lugar la pasada semana en Valencia, que fue refrendada el pasado domingo con la participación de Puig al acto celebrado en Madrid por Sánchez.
Una situación que reabre el debate sobre la comunicación entre Ferraz y Blanquerías. En más de una ocasión desde Madrid se ha obviado a la dirección valenciana a la hora de organizar encuentros: no hay más que recordar la visita de Sánchez a Valencia en Fallas, donde se priorizó la reunión en el Ayuntamiento en la que participó Mónica Oltra a un encuentro institucional con el presidente de la Generalitat.
Los desaires no se quedan ahí, según admiten fuentes del PSPV, por lo que no resulta extraño que desde la cúpula de los socialistas valencianos no se haya hecho lo imposible para que Puig esté presente en el citado acto y, de la misma manera, desde Ferraz tampoco parece que se haya tratado de adecuar los planes de Sánchez para hacerlos coincidir con Puig que, como recuerdan las fuentes consultadas, "tiene una agenda apretada como le corresponde a un presidente de la Generalitat".
Una situación que reafirma la tesis instalada en el PSPV de que el acto celebrado en Valencia la pasada semana se limitó a un apretón de manos basado en una tregua de cartón que no oculta la fragilidad de las relaciones entre ambos líderes. Y es que como bien apuntaba un veterano dirigente socialista a este diario: "¿Alguien se imagina que Susana Díaz viniera a Valencia y Ximo Puig no estuviera presente?".
Por otro lado, las fuentes del PSPV consultadas por este diario restaron importancia a esta ausencia y señalaron que la previsión indica que Sánchez tiene programadas en el calendario diversas visitas a la Comunitat Valenciana en las próximas semanas, especialmente durante la campaña electoral.