VALÈNCIA (VP/EFE). El hasta ahora secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, se ha despedido este sábado como líder del partido con un "profundo sentimiento de gratitud" y ha pedido no dar "ni un paso atrás" frente a la "contrarreforma" del gobierno actual PP-Vox. Es así como ha asegurado que cede el testigo con cohesión interna y a "una líder más preparada que nunca", Diana Morant.
Puig, que ha intervenido en la jornada inaugural del congreso extraordinario del partido en el que se ha ratificado a Diana Morant como su sucesora, ha destacado que hoy se cierra un ciclo se doce años y se abre otro "de esperanza combativa", en el que hay que "vigorizar" el proyecto socialista.
El actual embajador de España ante la OCDE ha instado a asumir de dónde viene y dónde está el PSPV-PSOE: "en posición de disputar en plena forma y ya mismo cualquier elección", porque según ha dicho han sabido "renacer" tras perder las elecciones y lo han hecho con la vocación de ser "el partido de la mayoría".
El también expresident de la Generalitat ha hecho hincapié en que "2024 no es 1995, no ha de ser 1995" (cuando los socialistas perdieron la Generalitat y pasaron veinte años en la oposición) y se ha mostrado convencido de que el actual Consell de PP y Vox será el ciclo "más corto de la historia valenciana".
Ximo Puig se ha despedido asegurando que no entiende su vida "sin este partido" y ha asegurado que lo mejor "está por venir" y "volveremos a mejorara la vida de los valencianos".
Por eso, ha indicado, se marcha "lleno de recuerdos, de esperanzas y de amigos" y ha dado las gracias por estos 12 años en los que ha estado al frente del PSPV-PSOE por "el cariño compartido, por hacerme un poco mejor, por la fuerza, el coraje y la amistad".
Y ha indicado a los militantes presentes en el congreso celebrado en Benicàssim que les deja "en muy buenas manos", al tiempo que ha señalado que "ni la distancia será la ausencia, ni el silencio prudente será un olvido".
Se ha dirigido también a aquellos que "vaticinaron el apocalipsis" en el PSPV y que decían que "entraríamos en una lucha interna". Pero el partido socialista valenciano, ha señalado, "está volcado hacia fuera y ha hecho fracasar a nuestros adversarios que querían un PSPV inútil y que fuera una autopista libre para la barbarie" y ha agregado que "no la van a tener".
En este congreso se va a sellar, ha aseverado, "un nuevo acuerdo con las bases de la audacia política, la ruptura de dogmas internos y un nuevo pacto con la sociedad". Y es momento, ha dicho, de renovar equipos con un "liderazgo sólido, moderno e imparable, el de Diana Morant".
Una ministra, ha apuntado, que será la primera secretaria general del partido. Una "anomalía que vamos a corregir" como también que "no hayamos tenido una presidenta en la Generalitat".
Puig ha señalado que se cierra hoy un ciclo de 12 años y se abre "otro ciclo de esperanza combativa" que llega en una situación "distinta", con ciclos políticos más cortos y en el que estamos "solo a 30.000 votos las derechas de las izquierdas". Ese pasado, ha agregado, "está ahí y es una fortaleza para el futuro que ahora empieza".
Ahora, ha indicado, se abre una etapa de "cohesión interna" y con una líder "más preparada que nunca" y ha abogado por hacer autocrítica y análisis pero para "vigorizar el proyecto y ver de dónde venimos y dónde estamos".
"Hemos sabido renacer juntos y revertir una tendencia negativa" que llevó a los socialistas a conseguir la Generalitat 20 años después y "a convertirnos en un partido de referencia desde el respeto, la unidad y la integración con la defensa siempre de los intereses valencianos y con la vocación de aglutinar mayorías".
Y ha repasado algunos hitos conseguidos por el PSPV al frente de la Generalitat en los últimos ocho años con presupuestos "aprobados" y con avances en la industrialización como el acuerdo con Volskwagen para la construcción de la gigafactoria en Sagunto en pro del "crecimiento sostenible" o la gestión de la crisis sanitaria de la pandemia.
En este sentido se ha referido al informe que ha revelado que más de 4.000 personas mayores que fallecieron en residencias en la Comunidad de Madrid "pudieron salvarse". Mientras señala el mismo texto que en la Comunitat Valenciana "2.600 personas se salvaron por encima de la media nacional".
"Unos apostaron por la banalización de abrir bares y la libertad y unos asumimos colectivamente la responsabilidad y otros pensaron en la calculadora electoral", ha aseverado.