VALÈNCIA (AGENCIAS). El 'president' de la Generalitat Valenciana y líder del PSPV, Ximo Puig, ha prometido que mantendrá "el mismo tono reivindicativo" con el nuevo gobierno de Pedro Sánchez, "sin reivindicar por reivindicar y sin hacer victimismo", y ha descartado que existan "reticencias reales" entre los barones socialistas.
De cara al futuro, ha pedido que los primeros presupuestos del Gobierno PSOE-Unidas Podemos salgan adelante en el primer trimestre, con el 10% de inversiones para la Comunitat, y que 2020 suponga el inicio del cambio de modelo de financiación autonómica.
También ha confiado en que sigan ministros como el de Fomento, el valenciano José Luis Ábalos, o el de Ciencia, Pedro Duque, aunque "es una decisión del presidente y las cosas hay que hacerlas bien". "Estamos en el tiempo de las soluciones", ha manifestado a preguntas de los periodistas tras reunirse con el director general de Consum, Juan Luis Durich.
Puig ha negado que el retraso del nombramiento de ministros suponga un problema, pues entiende que Sánchez "tendrá que tomar alguna decisión que comporte más tiempo". Sí ha pedido que "la política española deje de mirarse el ombligo y ahora mire hacia la gente", acabando con el "frentismo" y con la postura "bastante lamentable" de la oposición durante el debate de investidura.
"El griterío y lo que vimos ayer me produce tristeza y dolor. No es el camino: no hay que volver a las dos 'españas' ni al frentismo, eso es absurdo con la sociedad actual", ha reivindicado, porque "en la calle no existe esa crispación, afortunadamente". Y ha enfatizado: "Aquellos que pretenden llevar la crispación a la calle no solo se equivocan, sino que cometen una tremenda irresponsabilidad".
Igualdad más allá del "identitarismo"
En clave valenciana, Puig ha descartado que el arco parlamentario actual pueda complicar los intereses de la Comunitat, porque "España no es homogénea y es lo primero que se tiene que asumir", y ha apuntado como "hecho indiscutible" que no hay igualdad entre todos los españoles. "Más allá del identitarismo, hay que buscar fórmulas de garantizar la igualdad", ha defendido.
Ha destacado, eso sí, que ahora se dan las condiciones para que todos los partidos, "los del gobierno y los de la oposición", se comprometan con un modelo de financiación autonómica que garantice la equidad que dicta la Constitución.
Hasta entonces, ha confiado en el compromiso del Gobierno PSOE-Unidas Podemos de poner sobre la mesa una propuesta en los ocho primeros meses de legislatura. "Nadie cuestiona que la Comunitat Valenciana es la peor financiada; se trata de tomar decisiones a través de esta primera toma de conciencia", ha aseverado.
El jefe del Consell ha sostenido así que la agenda valenciana no perderá presencia en el nuevo Ejecutivo de Sánchez, ante la "presencia importante" de la Comunitat en el Congreso gracias al diputado de Compromís, Joan Baldoví, con lo que la Comunitat "tiene una capacidad de interlocución muy positiva y mayor que otras comunidades en otras condiciones".
Ha resaltado la "sintonía" de objetivos y el programa de gobierno similar al del Botànic, recordando que "el propio Sánchez dijo en el discurso de investidura que se iba a aplicar el modelo valenciano" y garantizando que convergerán en política social y económica para la creación de empleo y el mantenimiento del Estado del Bienestar.
En este contexto, ha prometido que la Generalitat asume el "reto" de defender los intereses de los valencianos "con este gobierno al igual que con cualquier otro", confiando en que "lo más rápidamente posible, en este primer trimestre, haya Presupuestos Generales del Estado (PGE)", unas cuentas que incluyan el 10% de inversiones para la Comunitat como el proyecto del año pasado que no salió adelante.
El alcalde de València, Joan Ribó, ha asegurado que la investidura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es un "paso muy importante para esta ciudad" donde se estaba "muy atascado en muchos temas" como la deuda de La Marina o las inversiones en infraestructuras ferroviarias.
Ribó ha afirmado este miércoles en rueda de prensa que están esperando saber a quién ponen al frente de los ministerios de Hacienda y de Fomento "para pedir una entrevista y hablar de estos temas", pues a su juicio son "fundamentales".
El alcalde ha mostrado su "satisfacción" por la elección del presidente "desde la confianza de que avanzaremos. Por primera vez en muchos años avanzaremos seriamente".
"Ya era hora de tener un Gobierno en España, había muchísimas cosas paradas como consecuencia de esta situación", ha dicho Joan Ribó, quien ha puesto como ejemplo que si no se "pagan rápidamente" las deudas de La Marina "podría tener problemas graves".
"Nos preocupan determinada actitudes, parece que solo se ha sentido una sola voz, o que todos han cogido la misma voz, la más extrema, como si solo quedara una voz discrepante, pero por encima de todo pensamos que vendrán a resolver problemas", ha indicado.
Respecto al calendario de reivindicaciones, el alcalde ha señalado que eso "está muy claro: pagar la deuda de La Marina y las grandes inversiones ferroviarias que hay que hacer en esta ciudad".
"Es imprescindible abordarlos de una vez por todas, y no digo que no haya voluntad hasta el momento. Estaremos muy atentos que eso se desarrolle con a una velocidad importante", ha destacado Ribó.
A su juicio "es imprescindible que Valencia tenga una infraestructuras ferroviaria porque es un nodo fundamental del Corredor Mediterráneo".
"Ahí está el canal de acceso, que está en una fase de estudio avanzado, está la necesidad de hacer un reglamento de la estación y de hacer el estudio de la salida hacia el norte del Corredor Mediterráneo, está la necesidad de soterrar las vías y la prolongación del túnel de Serrería. Nos parecen temas fundamentales", ha recordado.
En otras grandes ciudades españolas como Zaragoza, Sevilla, Madrid o Barcelona, el Estado ha sufragado inversiones de este tipo y, además, está firmado en el acuerdo que Pedro Sánchez firmó con Compromís, según Ribó.
Preguntado por las subvenciones para el transporte metropolitano, ha precisado que no es un tema estrictamente municipal y que su reivindicación corresponde a la autoridad metropolitana, aunque ha considerado que esta financiación es "imprescindible".