VALÈNCIA. Primero fue sorpresa. Después disgusto. Finalmente, estupor. Las excavaciones de la fosa 82 de Paterna han sido una experiencia desagradable para los profesionales que trabajan en ella. Tras más de un mes de trabajo, tras alcanzar una profundidad de cuatro metros, los arqueólogos que participan en los trabajos sólo han podido encontrar "restos parciales" de dos hombres adultos, y restos de tres niños y una mujer, estos cuatro sin relación con la represión de la postguerra. Ni rastro pues de 18 víctimas del franquismo.
Las sospechas de los investigadores que participan en el proyecto es que las fosas fueron removidas entre los años cincuenta y setenta y que en algún momento los cuerpos fueron desplazados. ¿Adónde? Ese es el misterio y quizás la explicación de por qué hay tantas personas que se oponen a que se abran las fosas. Nadie sabe dónde se hallan los cuerpos de las personas fusiladas por el franquismo.
No existe información documental fiable y la oral, la que hasta ahora daba por segura la presencia de esos muertos, ha resultado errónea porque alguien, en algún momento durante la dictadura franquista, decidió abrir las fosas y llevarse de allí los restos de las personas fusiladas a la conclusión de la Guerra Civil.
Más que una decepción, los historiadores y arqueólogos valencianos que participan en los trabajos de Paterna han descubierto la dificultad de hacer justicia con los muertos represaliados del franquismo, muchos de los cuales jamás podrán tener una sepultura digna porque sus restos fueron esparcidos y jamás podrán ser encontrados. Como si se tratara de una maldición bíblica.
Por el momento los investigadores han aceptado que en lugar de los 20 cuerpos que esperaban hallar, sólo estén dos. "Pese a la sorpresa estamos satisfechos", aseguraba el arqueólogo Miguel Mezquida, "porque hemos encontrado restos de estos dos posibles represaliados". Es por eso que según explicaba el arqueólogo activarán el plan B, que es exhumar las fosas 91 y 92. "Ahora tengamos esperanza en el plan b y en poder encontrar a los otros 18 fallecidos, que además cuatro son los familiares de quienes han apoyado el proyecto", apuntaba.
Antes de entrar a trabajar en esta fosa Mezquida relató cómo afrontarán a partir del día 22 la excavación de la fosa 113, la más grande de la Comunitat Valenciana. Acompañado de la diputada Rosa Pérez, junto a quien dio a conocer el resultado provisional de las exhumaciones, Mezquida recordó que en esta última fosa esperan hallar 60 cuerpos. Aunque tras la experiencia de la fosa 82 ya saben que cualquier cosa es posible. Pero, como dice Mezquida, "nos pueden quitar todo menos la esperanza".