Manuel Ruiz, presidente de la Unacc (Foto: Rafa Molina) VALÈNCIA. La treintena de cajas rurales repartidas por la Comunitat Valenciana (17 integradas en Cajamar, 11 de la Asociación Española de Cajas Rurales y 2 en Solventia) siguen haciendo historia. Si a lo largo del primer trimestre de este año ganaron un 19% más rozando los 11 millones de euros, el semestre concluyó con una nueva plusmarca: 26,98 millones de euros, es decir, un 28,08% más respecto al periodo enero-junio de 2021. Así lo atestiguan los datos individuales que colgó ayer lunes en su web la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC), presidida por Manuel Ruiz, presidente también de la Caja Rural Central de Orihuela.
Un resultado ascendente con la particularidad que todavía no están recogidos los impactos -a favor- de las dos subidas de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE), dado que se produjeron el 21 de julio del año en curso (+0,50%) y el pasado jueves 8 de septiembre (+0,75%). Un endurecimiento de la política monetaria que va a tener continuidad para tratar de combatir una inflación desbocada.
Unas cooperativas de crédito que siguen sobresaliendo en un sector financiero muy tocado, que continúa con su proceso de desapalancamiento. O lo que es lo mismo: cierre de oficinas y despidos/prejubilaciones por doquier. Tal y como publicó Valencia Plaza el pasado mes de mayo, las cajas rurales de la UNACC en todo el territorio nacional, que representan más de dos tercios del total del sector, aumentaron el número de socios, la concesión de créditos y la captación de depósitos durante 2021.
Unos números que reflejan la confianza de la clientela, y más de aquella que vive en pequeños municipios donde la presencia bancaria se ha venido reduciendo en los últimos años. Ahí es donde siguen teniendo las cooperativas de crédito un nicho de mercado para seguir explotando, que a buen seguro lo van a hacer a la vista de la buena respuesta que están obteniendo.
Si en la primera parte de 2021 dos fueron las cooperativas de crédito valencianas las únicas en reducir sus ganancias (Alcora y Albal), en esta ocasión también han sido otras dos: L'Vall San Isidro y Ruralnostra/Betxí. La primera, que forma parte del Grupo Cooperativo Solventia, recortó su beneficio un 21,89% hasta los 376.064 euros; mientras que la segunda, que sigue 'soltera' -más allá de pertenecer a la asociación de la 'espiga'- ganó un 8,54% menos totalizando 746.801 euros.
Las 17 entidades que forman parte del principal grupo cooperativo español (Cajamar) obtuvieron un beneficio conjunto semestral de 2,05 millones, un 13,60% más que en idéntico periodo de 2021 y todas ellas crecieron a doble dígito. En términos porcentuales destacaron Católico Agraria de Vila-real (+23,94%), Xilxes (+18,54%) y Vilavella (+17,46%). En términos absolutos el 'top 3' lo formaron Torrent (+46.189 euros), Vila-real (+45.006 euros) y Altea (+21.513 euros).
Por su parte, las 11 del Grupo Caja Rural catapultaron su beneficio conjunto un 31,43% hasta los 24,04 millones de euros. Ni que decir que volvieron a ser Caixa Popular y Caja Rural Central de Orihuela las que llevaron el peso del mismo. La primera mejoró sus cuentas un 32,02% hasta los 8,51 millones; mientras que la segunda lo hizo a un ritmo del 38,16% hasta los 8,50 millones. Las mayores subidas porcentuales correspondieron a Vinaròs (+74,95%), Les Coves de Vinromà (+43,15%) y Central de Orihuela (+38,16%). Esta última lideró las ganancias absolutas con 2,35 millones de euros, seguida de Caixa Popular (+2,06 millones) y Vinaròs (+210.231 euros).
Por último, las dos cooperativas de crédito de la Comunitat que forman parte del Grupo Cooperativo Solventia -liderado por la extremeña de Almendralejo- mostraron un tono dispar. Así, Benicarló ganó un 5,47% más llegando hasta los 521.445 euros frente a L'Vall San Isidro que redujo su beneficio un 21,89% hasta los 376.064 euros.
