Ribó se moja en la 'primera vuelta' de la lucha por la Alcaldía de València

VALÈNCIA. El calendario electoral en la Comunitat Valenciana convierte los próximos meses en tiempos inciertos para el terreno político valenciano. Como bien es sabido, el próximo 28 de abril confluirán las elecciones generales y, tras el adelanto anunciado por Ximo Puig, las autonómicas. Un mes más tarde, el 26 de mayo, se celebrarán los comicios municipales y europeos. En este contexto, no será difícil que los discursos de cariz estatal se entrelacen con promesas para la Comunitat y sin dejar de mirar a Europa y a los asuntos municipales. Todo suma para recabar apoyos en torno a cada marca electoral.

Este viernes se dio a conocer que el candidato a la Alcaldía de València por Compromís, Joan Ribó, cerrará la lista de la coalición valencianista al Congreso por la provincia de Valencia. Se trata, en primer lugar, de una elección simbólica. El ya primer edil de la capital del Túria es la viva imagen de la unidad y del consenso interno de la coalición, formada por tres partidos –Bloc, Iniciativa, y Verds-Equo- y el colectivo de adheridos.

Además, es ya un rostro muy conocido tras cuatro años ejerciendo el cargo de alcalde, y su elección para cerrar la lista completa el 'ticket' de Compromís para la cita con las urnas en abril, sumándose así a las otras dos figuras más conocidas de la coalición que concurrirán a sendas convocatorias: Joan Baldoví a nivel estatal, y Mónica Oltra a nivel autonómico. Con ello, Compromís se refuerza ante las  dos campañas que se celebran simultáneamente, hecho que previsiblemente diluirá en el maremágnum estatal el relato valenciano, principal baza de los valencianistas.

Pero la cuestión va mucho más allá. Las previsiones electorales en la ciudad de València dejan en el aire la reedición del tripartito de izquierdas liderado por la coalición. Es más, un estudio interno del PSPV otorga empate técnico entre el Partido Popular de María José Català y Compromís, seguidos muy de cerca por los socialistas de Sandra Gómez. Todo puede pasar. Máxime teniendo en cuenta que el actual ejecutivo local –Compromís, PSPV y Podem- únicamente gobierna con un concejal más que los que tiene la oposición. Y la entrada de Vox puede decantar decisivamente la balanza en favor del bloque de derechas.

En ese sentido, prestar atención a los resultados de la capital en las elecciones del 28 de abril es de suma importancia. Si bien no serán datos que deban necesariamente repetirse en los comicios locales de mayo, sí que permitirán a los partidos tener una prueba mucho más fiel a la realidad que la que reflejan los sondeos electorales internos y los publicados por los medios de comunicación. Tras ver qué ocurre en esta primera prueba, podrá cada formación dirigir su campaña local de mayo en una u otra dirección, o corregir la que ya se había emprendido.

Con todos estos mimbres, no es extraño que el líder de Compromís en la capital, Joan Ribó, haya decidido implicarse en la candidatura al Congreso. Además de un apoyo explícito a sus compañeros para conseguir tener un grupo propio en el Parlamento, es también el reflejo de que la Alcaldía de València se juega en 'doble vuelta'. Y Ribó ha decidido tomar partido ya en la primera.