MADRID (EP). El vicepresidente de Popular Roberto Higuera presidirá la junta extraordinaria de accionistas de la entidad, que se celebrará el 20 de febrero y en la que se votará el nombramiento de Emilio Saracho como consejero ejecutivo del banco.
Según han informado a Europa Press fuentes del banco, está previsto que mismo día 20 tenga lugar un consejo de administración previo a la junta en el que el actual presidente, Ángel Ron, será cesado y dimitirá como consejero.
Posteriormente se celebrará la junta extraordinaria de accionistas, que, entre otras cuestiones, votará una modificación de la política retributiva y el nombramiento de Saracho. Una vez nombrado, el consejo retomará su reunión tras la junta y le nombrará nuevo presidente de Popular.
Según consta en la documentación de la entidad relativa a la política de remuneraciones de los consejeros, Emilio Saracho cobrará una retribución fija de 1,28 millones de euros tras asumir su cargo.
En concreto, el consejo de administración de la entidad, a propuesta de la Comisión de Retribuciones, acordó que Saracho perciba dicha retribución fija de casi 1,3 millones de euros desde el próximo 20 de febrero al 31 de diciembre de 2017, a la que se sumarán las retribuciones en especie y variables destinadas a los consejeros ejecutivos.
El nuevo presidente de Popular es un gran conocedor del sector financiero. Actual vicepresidente mundial de JP Morgan Chase, a lo largo de su carrera ha participado en la creación y desarrollo del Banco Santander de Negocios, ha trabajado para Goldman Sachs en Londres, es consejero de Inditex y consejero no ejecutivo independiente de IAG.
Desde la presidencia de la entidad tendrá que hacer frente ahora a una serie de retos, entre ellos reforzar la solvencia del banco y decidir si impulsa el 'Proyecto Sunrise', por el que se creará una sociedad de activos inmobiliarios por importe bruto de 6.000 millones de euros que cotizaría en Bolsa, o apuesta por un plan alternativo.
Los analistas financieros tienen sus opiniones divididas sobre si Saracho impulsará una nueva ampliación de capital o si posterga esta iniciativa y dará prioridad a la venta de activos estratégicos.
Su desembarco en Popular se producirá meses después de que el consejo de administración forzara la salida de Ángel Ron de la presidencia, después de permanecer doce años al frente de la entidad.
Bajo su mandato, el banco integró Banco Pastor en plena reestructuración del sector financiero español, una operación que realizó sin ayudas públicas. Pero el 'ladrillo' asumido y la negativa a traspasar parte de estos activos a Sareb comenzaron a pesar en el balance de la entidad y se convirtieron en el origen de muchos problemas actuales.