VALÈNCIA. El profesor de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social en la Universitat de València (UV), Adrián Todolí, remarcó ayer en el acto de presentación del informe Salud Mental, Desconexión Digital y Teletrabajo elaborado por UGT-PV y la cátedra de Derecho de la UV la importancia de la desconexión digital para la mejora de la salud de los profesionales.
España es el segundo país, tras Francia, que aprobó el derecho a la desconexión digital, aunque “se ha guardado en un cajón”, en palabras del profesor de Derecho. “No por estar en el BOE está todo hecho. Es necesario todo un proceso para que se lleve a cabo, especialmente en el derecho del trabajo”, apuntó Todolí durante su intervención
Todolí, que ha sido la cabeza más visible de la elaboración de este informe, consideró que el documento “pone en valor la importancia de la salud mental”. Este informe se centra en especial durante el teletrabajo, que puede suponer “grandes riesgos en materia de enfermedades mentales”. El profesor remarcó que este documento evidencia “las posibilidades que hay en materia de desconexión digital” para que las empresas y sus trabajadores puedan ponerlas en marcha.
Todolí expuso que, para poder reducir los problemas de salud mental, es clave centrar el foco “en la prevención y no en la reparación”. El profesor reconoció que desde las instituciones se ha puesto de relieve en los últimos años la importancia de la salud mental, pero consideró que esta cuestión no se aborda de la forma correcta, pues pone el foco en la ateción.
“Muchas de las medidas que se proponen están basadas en la atención, lo que es crucial, pero no se puede olvidar la parte de prevención. La perspectiva de la prevención no está siendo debidamente analizada. La clave está en evitar que pase algo, en vez de repararlo”, remarcó Todolí.
En cifras, en la presentación del informe, se apuntó que casi un 70% de los teletrabajadores dice trabajar fuera de su horario con cierta frecuencia, según datos recopilados previa a la elaboración del estudio. Además, al 30% de los teletrabajadores les provoca un aumento de la carga del trabajo esta modalidad de empleo.
Entre los problemas que figuran en el teletrabajo también se expuso que el 74% de los que lo ejercen aportan su propio ordenador para llevar a cabo sus labores. No obstante, Todolí destacó que, en general, se ha demostrado que el teletrabajo es positivo, ya que los empleados están más contentos, lo que hace más probable que no busquen cambiar de empleo.
Este informe atiende a tres objetivos que se pueden resumir en la protección de los teletrabajadores y la importancia de separar la vida laboral del ocio. El documento busca poner el foco en la prevención y no solo en la reparación de los problemas de salud mental. “Esa perspectiva de la prevención no estaba siendo debidamente analizada. La clave está en evitar que pase algo, en vez de repararlo”, expuso el profesor durante su intervención. Este documento también pretende impulsar la herramienta de la desconexión digital, así como que los riesgos del teletrabajo “no caigan en el olvido”.
El informe, explican desde UGT, pone de relevancia aspectos como la conectividad permanente, la realización del trabajo en horarios o lugares poco habituales, así como la prolongacón indeseada de la jornada. Ademas, realiza un análisis transversal con perspectiva de género al analizar los riesgos de discriminación así como los estereotipos que se asocian con los cuidados.
UGT considera que este documento estudia los riesgos derivados de la falta de desconexión laboral y de no respetar los descansos. También investiga las consecuencias que puede tener para la salud usar de forma indebida las tecnologías realacionadas con el ámbito laboral. El informe, ante ello, propone una serie de medidas que esperan que sirvan de base para la negociación colectiva a la hora de mejorar la prevención de riesgos laborales en materia de salud mental.
Entre las medidas propuestas, está la consciencia del riesgo y la capacidad de ofrecer herramientas a los representantes de los trabajadores y los sindicatos. También se apuesta por el progreso desde las Administraciones Públicas, así como en la evaluación de riesgos que realizan los servicios de prevención y la implementación posterior de las medidas.