VALENCIA. Turisme, el departamento que dirige el secretario autonómico Francesc Colomer, sigue orientando sus acciones acorde al nuevo rumbo que quiere darle a esta política, basada en una concepción del turismo como accesible, universal y abierto a todos. En esta línea, se ha decidido que siete de las ocho personas elegidas para asistencia y atención en el stand de Fitur de la Comunitat Valenciana sean personas con discapacidad contratadas a través de Cocemfe.
Dos de ellas estarán ubicadas en las puertas de las Salas de Prensa. Allí informarán de las Presentaciones y de las prestaciones de las salas. Otras dos estarán ubicadas en la puerta de la cafetería, donde controlarán el acceso e informarán de los sucesivos eventos. También darán apoyo para colocar los bolados en el showcooking y para el control del público en el reparto de las degustaciones.
Una persona estará en guardarropía, donde recogerá los artículos y entregará los tickets, además de colocar los abrigos y bolsos y devolverlos posteriormente. Otra persona se ubicará en la zona business, concretamente en el mostrador de recepción de los empresarios que quieran hacer uso de este espacio. Allí recogerá datos y controlará el uso de la zona. Durante el fin de semana dará apoyo a la Ludoteca
Otra persona hará tareas de refuerzo. Todo el personal tiene dos horas libres para comer, tiempo en que irá sustituyendo a sus compañeros en las anteriores funciones. Cuando todo el mundo se encuentre en su respectivo puesto se encargará de recorrer el stand para repartir material entre las marcas.
Esta decisión contrasta con la imagen que se había dado hasta ahora, tanto de determinadas apuestas en el sector como de Fitur en sí misma. Ahora se pretende huir de esa visión y de esa imagen más superficial de la Comunitat Valenciana para dar paso a una tierra de acogida, de valores, y el objetivo de Colomer es que todo lo que se muestre al público en Fitur esté vinculado a eso.
"Desde la política turística también se defiende la igualdad y se transforman las injusticias. Nuestro propósito es ayudar a normalizar y a visibilizar la valía y el talento de aquellos colectivos que no suelen estar en la primera línea de la imagen convencional de la publicidad y en las ferias", explica Colomer. "Queremos romper el mito y el canon de las azafatas con el estereotipo de siempre. La imagen típica y tópica está desfasada y queremos predicar con el ejemplo. Vamos este año a Fitur a transmitir valores y a explicar con argumentos q somos una tierra hospitalaria, tolerante, inclusiva y sin complejos".