VALENCIA. El portavoz de Ciudadanos en Les Corts, Alexis Marí, se ha cansado de esperar. Desde que el PP, Ciudadanos y Podemos avanzaran quiénes eran sus candidatos para renovar el Consell Jurídic Consultiu y los populares se enrocaran en que no votarían al miembro que propusieran los morados han pasado ya casi dos meses. Durante este período, los portavoces de los tres partidos se han reunido en varias ocasiones para acercar posturas sin que se haya producido hasta ahora un cambio en la posición de la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, que mantiene que su grupo votará sólo a su candidato.
No obstante, para resolver un conflicto que lleva abierto demasiado tiempo, el síndico parlamentario de los naranjas le lanzó un ultimátum a su homóloga en el PP este viernes: o aceptan a los tres candidatos que cada partido propone para renovar el órgano que lleva en funciones desde hace casi cinco meses o Ciudadanos resolverá la situación y no votará al candidato que presenten los populares, con lo que este no saldría elegido.
Un escenario que ya propuso el PSPV hace un mes. Para evitar que el bloqueo e inmovilismo del PP se prolongara en el tiempo tanto como lo hizo la elección del Consejo Rector de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC) por las discrepancias con Maite Fernández, los socialistas propusieron a los naranjas tener dos representantes en el CJC y que el tercer nombre fuese propuesto por Podemos.
Así, PSPV, Compromís, Podemos y Ciudadanos respaldarían a José María Tomás y Tío y a Rubén Martínez Dalmau -candidato propuesto por Podemos- y no votarían al miembro del PP, Enrique Fliquete, sino a otro nombre que registrasen los naranjas.
La situación no sólo podría atraer al partido de Marí por tener el doble de representación en el CJC de la que ahora mismo optan, sino que además con ello salvarían el conflicto existente en el seno del grupo parlamentario en el que la mitad respaldaban al candidato José María Tomás y Tío y el otro 50% simpatizaban con un magistrado alicantino del que no llegó a conocerse el nombre.
Cabe recordar que los populares han aprovechado hasta el momento su propio inmovilismo, pues hasta que se renueven los miembros que les pertoca nombrar a Les Corts -la otra mitad ya fueron sustituidos por el Consell-, el PP cuenta con dos juristas en el órgano. Mientras, Ciudadanos no tiene ninguno y Podemos tampoco.
Cuando el portavoz socialista Manolo Mata lanzó la estrategia para "sacar adelante los miembros del CJC" y así evitar que el grupo que lidera Bonig pudiera "romper la baraja" de los consensos alcanzados, la maniobra ya se preveía con altas probabilidades de éxito.
El portavoz de Ciudadanos afeó entonces la actitud del PP por entender que el papel de oposición pasaba por "el bloqueo constante de las instituciones". Así, tras desmentir que a los populares se les hubiera dejado de lado en los procesos de negociación de la elección del Consejo Rector del CVMC y después del CJC, Marí cargó contra la presidenta del PPCV y "el talante negociador" del partido que lidera -en referencia a su rechazo a abordar el tema tras la Junta de Portavoces que acababa de producirse aquel día-.
Parece que ahora, la estrategia de bloqueo ejecutada por el PP podría volverse en su contra. Si el grupo no quiere quedarse sin representación en el órgano consultivo y apostar por el máximo consenso que pide Ciudadanos -partido imprescindible para que tanto el miembro de Podemos como el del PP salgan adelante, pues necesitan 59 apoyos-, deberá aceptar al candidato que proponen los morados. La renovación del Consell Jurídic parece cada día más cerca.