VALÈNCIA. La insuficiencia venosa crónica, es una patología en la que las venas del cuerpo (generalmente de las piernas) se dilatan de forma progresiva y se vuelven tortuosas, ocasionando las conocidas varices. Estas dilataciones venosas pueden ocasionar gran cantidad de síntomas, que en algunas ocasiones pueden llegar a ser muy molestos para realizar nuestras actividades cotidianas.
Según diferentes estudios epidemiológicos, su prevalencia en la población mundial oscila entre un 20-60%.
“Los pacientes que sufran este problema, deben consultar con un angiólogo y cirujano vascular ya que, si las varices no se tratan, pueden conllevar complicaciones como trombosis, úlceras o sangrado”, señala el angiólogo y cirujano vascular del Hospital IMED Valencia, Dr. Eliseo Candela.
En los últimos años, han surgido multitud de técnicas mínimamente invasivas para el tratamiento de las varices. Los tratamientos de eliminación de varices son cada vez menos agresivos y los tiempos recuperación en algunas de estas técnicas son casi inexistentes. Una de las últimas novedades en este campo aplicada por el servicio de angiología y cirugía vascular de IMED Valencia es la técnica Flebogrif.
¿Qué es el Flebogrif?
Flebogrif es una técnica de eliminación de varices mínimamente invasiva de reciente aparición. El objetivo de la técnica es producir una oclusión y eliminación de la vena de forma permanente. Esta intervención se realiza con un catéter, que se introduce en la vena a través de una punción bajo anestesia local, sin necesidad de sedación, anestesia epidural ni anestesia general.
Este catéter produce un daño en la vena que conlleva su oclusión por un método combinado físico y químico. A través de unos componentes metálicos en la punta del catéter, se daña la capa interna de la vena, mientras de forma simultánea se inyecta un fármaco en forma de microespuma que produce un daño químico sobre la capa interna del vaso.
El Dr. Eliseo Candela resume las ventajas de este tratamiento, “el procedimiento con Flebogrif se realiza en su totalidad de forma percutánea a través de una punción sin dejar cicatrices ni puntos de sutura sobre el paciente. Se trata de una actuación ambulatoria, en la que el paciente es dado de alta pocos minutos después de realizar la técnica, reincorporándose a su vida diaria de forma inmediata sin necesidades de baja laboral. Además, podemos tratar ambas piernas en una misma intervención”.
