VALÈNCIA. El tesoro ‘escondido’ de Antonio Muñoz Degrain comienza la cuenta atrás para ver la luz de nuevo. El Museu de Belles Arts de València, a través de la Dirección General de Cultura y Patrimonio, ha encargado la restauración de la obra El cabo noval por 26.620 euros (con impuestos) a Maria Salut Diez Reyes, un proceso que se llevará a cabo en un plazo de cinco meses en las propias instalaciones de la pinacoteca debido al tamaño de la obra y a su estado de conservación.
Este proceso devolverá a las salas del museo una pintura que lleva décadas en la sombra. Fue a finales de los años ochenta cuando se puso en marcha la ampliación del museo, momento en el que la obra abandonó las salas de exhibición para ir a un almacén en el que ha permanecido desde entonces. Cabe destacar que el Museu de Belles Arts de València en una de las grandes instituciones depositarias del legado de Muñoz Degrain, junto a la ciudad de Málaga, tras la generosa donación del autor.
La restauración de esta pieza se lleva a cabo gracias a la colaboración de la pinacoteca valenciana con la Fundación María Cristina Masaveu Peterson. Fue durante la inauguración de la exposición Colección Masaveu. Sorolla, que tuvo lugar el pasado mes de junio, cuando la fundación anunció la donación de mil ejemplares del catálogo al museo valenciano, cuya recaudación se ha destinado a la restauración de la mencionada pintura.
El cabo noval es una de las grandes obras que el valenciano presentó a la Exposición Nacional de 1910. En ella, Muñoz Degrain apuesta por una temática bélica contemporánea, un cuadro que presenta de manera heroica a Luis Noval Terros, conocido como Cabo Noval, quien recibió la Cruz de San Fernando a título póstumo tras la Guerra de Melilla. En este caso, la obra representa al militar en el centro de la composición, herido de muerte y atacado por soldados enemigos. Junto a él, caídos en el suelo, yacen dos cadáveres, mientras que Luis Noval estrangula a otro soldado que ha quedado atrapado en la alambrada.
Si bien todavía está pendiente la presentación de la programación de 2024, está previsto que, tras el centenario de Joaquín Sorolla, el museo se vuelque con la celebración del Año Muñoz Degrain, pues el próximo curso se conmemora el centenario de su fallecimiento. Para ello, tal y como desveló el director de la pinacoteca Pablo González Tornel, se prepara una “gran exposición” en torno a autor de la mano del Museo de Málaga, la otra principal institución española por lo que respecta a fondos del pintor y, por cierto, depositaria del boceto de la pintura que ahora se restaura en València.
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