VALÈNCIA (EFE). El Ayuntamiento de València coloca placas en recuerdo de las víctimas del terrorismo de ETA en aquellos puntos de la ciudad donde estos valencianos y valencianas perdieron sus vidas y ha trasladado el monumento a las víctimas del terrorismo a un punto de mayor visibilidad en la plaza de la Reina.
El gobierno municipal lo hecho coincidiendo con el 27 aniversario del asesinato del concejal Miguel Ángel Blanco por parte de la banda terrorista ETA, que se cumple el próximo día 13 de julio y cumple así un acuerdo del pleno del año 2022 y que el anterior gobierno nunca llevó a término.
Las tres placas colocadas pueden verse en las calles de València donde fueron asesinados José Edmundo Casañ, Josefina Corresa y Manuel Broseta. En la placa de este último también aparece el nombre de Ernest Lluch y Francisco Tomás y Valiente, que también fueron asesinados por la banda terrorista.
La alcaldesa de València, María José Catalá, ha señalado que han querido "atender las solicitudes de las asociaciones de Víctimas del Terrorismo que llevan años pidiendo varias acciones. Una de ellas era la de desplazar la escultura dedicada a las víctimas, que está ubicada en la plaza de la Reina, y ya lo hemos hecho".
Ha destacado que se han atendido sus peticiones "en el primer año de gobierno y es la manera de conmemorar el 27 aniversario del fallecimiento del terrible asesinato de Miguel Ángel Blanco a manos de ETA".
"Este gobierno y este Ayuntamiento está comprometido con las asociaciones de Víctimas del Terrorismo y con la memoria, dignidad y justicia que siempre reivindican para todos los fallecidos y los familiares de todas las víctimas de ETA", ha asegurado.
Asimismo, ha añadido que hoy han querido " dejar claro cuál es nuestro papel y que no es otro que luchar por la memoria, la dignidad y la justicia y sobre todo atender esas reivindicaciones y visibilizar que la lucha contra el terrorismo".
"Tenemos que seguir reivindicando la memoria para no blanquear los actos terroristas y, sobre todo, para que las nuevas generaciones tengan muy claro cuál fue el papel del terrorismo en nuestro país", ha agregado.
El Monumento a la Paz y a la Concordia es obra del escultor y artista fallero valenciano José Puche Hernández, está realizada en bronce y representa un desnudo femenino alzando con sus brazos un lienzo con palomas.
El monumento nace en memoria y reconocimiento de las víctimas del terrorismo, como se puede leer en la inscripción frontal de su pedestal. En su pedestal, hay otra inscripción lateral que dice: “La Paz y la Concordia son hijas de la razón y de la mente".
Fue realizado en 1998 y colocado el 23 de noviembre del mismo año en la confluencia entre la plaza de la Reina y la calle de la Pau, entre las palmeras de la zona.