VALÈNCIA. El Cabanyal intenta recuperar el tejido residencial que ha ido perdiendo en las últimas décadas entre la emergencia de los pisos turísticos y a la espera de la aprobación definitiva de un Plan Especial que pretende potenciar el carácter residencial del barrio. Pero también la administración pública cuenta con patrimonio en el barrio para contribuir a esta empresa, parte del cual se encuentra infrautilizado o baldío.
Concretamente, el Ayuntamiento de València tiene en propiedad 164 viviendas públicas en el barrio del Cabanyal-Canyamelar y en la Malva-rosa. Y de ellas, únicamente 41 están gestionadas por el servicio de Vivienda y Bienestar Sociial del consistorio, que dirige la edil Isa Lozano. Mientras, el resto -123 inmuebles municipales, el 75%- permanecen sin uso en el distrito marítimo.
Según explican en la concejalía de Patrimonio, dependiente de la misma edil, estas 123 viviendas "no tienen uso residencial ni están adscritas". Se trata de patrimonio municipal que todavía no ha sido rehabilitado. "En el Cabanyal hay mucho patrimonio por recuperar", explican a este diario fuentes de la delegación de Lozano.
Asimismo, es conveniente resaltar que en esta bolsa de vivienda propiedad del Ayuntamiento de València, 11 permanecen 'okupadas', según explica la misma delegación a respuestas formuladas por el grupo municipal del PP al respecto. Okupadas o, en otras palabras, "usurpadas u ocupadas sin título legítimo", o viviendas "ilegítimamente ocupadas".
Son inmuebles que se reparten especialmente en la 'zona cero' del barrio, en calles como Barraca, Reina, San Pedro o Vidal de Cañelles, y en otros enclaves conflictivos del distrito marítimo como los Bloques Portuarios. Se trata, eso sí, de un registro sensiblemente menor al registrado por la concejalía de Patrimonio hace apenas un año, cuando eran una veintena las propiedades municipales en esta situación. Eso sí, la cifra pfrecida es sólo de la que "se tiene conocimiento", en palabras de la propia delegación.
Además, existen 20 solares del consistorio repartidos por el distrito que todavía están sin construir. Se trata de parcelas que bien son propiedad exclusiva del Ayuntamiento o compartida con la empresa pública Plan Cabanyal -donde se integra también la Generalitat Valenciana-. En algunos casos son edificios derruidos que no han vivido una reedificación o una rehabilitación. En total, la superficie total de estos solares alcanza los 3.200 metros cuadrados.
Por el momento, ninguno de ellos está en venta, señalan en Patrimonio a los populares, aunque buena parte de ellos, una docena, podrían ser objeto de permuta con la firma Plan Cabanyal para obtener a cambio suelo o edificios que acaben destinados a equipamientos públicos. Estos se pueden encontrar en calles como Progreso, Francisco Eiximenis, Los Ángeles o José Benlliure, también en la 'zona cero'.