VALÈNCIA. Cuatro nuevos representantes de empresas de 'sharing' se reunieron este miércoles con el edil de Hacienda de València, el socialista Ramón Vilar. Sus nombres: Bolt, Reby, Moventia y Bird. Además de ellas, acudieron dos ya conocidas en el consistorio, Tier y Wind. El sector está expectante ante la futura regulación de la actividad en la tercera ciudad de España.
Una de ellas, Bolt, es una compañía fundada en Tallín, Estonia. Se dedica al negocio de vehículos de alquiler con conductor (VTC) si bien también se ha introducido en el de patinetes eléctricos. Es una de las empresas que operan ya en Madrid, con cerca de 750 patinetes eléctricos compartidos. Ahora, está tanteando la ciudad de València para desplegar aquí su flota de patinetes.
Otra de las empresas que se reúne con el gobierno municipal por primera vez es Reby, una 'start-up' que ha recibido inversores de la talla del gigante Mobike. Su negocio se ha centrado en vehículos de uso compartido de todo tipo, y fabricados por ellos mismos. Ha puesto en marcha una prueba piloto en Barcelona con decenas de patinetes eléctricos. Un modelo que ahora quiere hacer llegar también a la capital del Túria.
Moventia, por su parte, es un grupo empresarial catalán cuya filial Moventis está especializada en movilidad colectiva y movilidad sostenible. Desde 2016 opera en la ciudad de Helsinki los servicios de bicicleta pública, y desde 2018 hace lo propio en París. En total, ostenta más de 22.000 bicicletas.
Este diario ya había adelantado el interés de la empresa americana Bird en el cap i casal. La compañía está presente en Madrid desde noviembre, donde empezaron a operar con 20 patinates. La compañía fue fundada por Travis VanderZanden, anteriormente director general de operaciones de Lyft y vicepresidente de crecimiento de conductores en Uber. El principal inversor, Sequoia Capital, ha valorado Bird en 2.000 millones de dólares.
Además de estas cuatro novedades, otras dos empresas del ramo también asistieron a la reunión: Wind y Tier. La primera es una start-up propiedad de la alemana Byke Mobility, que ya opera con bicicletas en ciudades como Frankfurt, Munich o Berlín. Aquí pretende hacerlo con patinetes eléctricos. Tier también es de origen alemán y ofrece servicio de patinetes eléctricos en Alemania, Austria, Portugal y Francia. En España, ya está presente en Madrid y Zaragoza. Como curiosidad, Tier ofrece en su aplicación un apartado que explica dónde se pueden y dónde no se pueden dejar aparcados los patinetes.
La ordenanza fiscal que regulará el 'sharing' ya está lista. Sólo falta el visto bueno de los órganos de control internos del Ayuntamiento de València. Más tarde, podrá aprobarse por la Junta de Gobierno Local e iniciar la tramitación habitual de una ordenanza: 30 días de exposición pública y, a continuación, su aprobación en pleno municipal. Con todos estos plazos, la delegación de Hacienda del consistorio, que dirige el socialista Ramón Vilar, ha comunicado hoy, en una reunión con las empresas interesadas, que podrá salir adelante en el primer pleno del próximo mandato.
Tras meses y meses de espera, Hacienda ya ultima las tasas, pero aunque salgan adelante, la actividad todavía no estará regulada. Para ello, es necesario que las delegaciones de Movilidad Sostenible y Espacio Público, encabezadas por Giuseppe Grezzi y Carlos Galiana respectivamente, elaboren la regulación correspondiente para detallar, entre otras cosas, qué cantidad de vehículos de 'sharing' pueden operar en la ciudad. Sobre ello, poco se conoce todavía. Eso sí, como publicó este diario, el área de Grezzi ya comunicó a algunas empresas que el 'sharing' no se regularía, por lo menos, hasta junio, más allá de las elecciones.
Con todo, el equipo de Hacienda ya ha elaborado la ordenanza fiscal, que recoge las tasas a pagar por las compañías. De esta forma, cuando el resto de áreas hayan sacado adelante su normativa, esta ya estará aprobada y lista para aplicar, y se evitarán demoras innecesarias. "Desde el primer momento entendimos que las nuevas formas de movilidad han llegado para quedarse", apuntó Vilar tras la reunión con las empresas.
Así, y según había avanzado la delegación de Vilar, se prevé cobrar en torno a 70 euros anuales por bicicleta eléctrica, 80 euros anuales por patinete, 76 por ciclomotor y 82 por moto eléctrica. La tasa aplicable a los coches ascendería a 960 euros anuales, y también se gravarían los vehículos turísticos "segway", con 35 euros anuales, y "tuk tuk" (100 euros).
"Hemos detectado en torno a unas 4.000 motocicletas eléctricas que no satisfacen tasas ni se encuentran sometidas a ningún control más allá de la ordenanza de movilidad o la normativa de tráfico", señaló el edil, que hizo hincapié en que los coches, motocicletas y ciclomotores eléctricos son "vehículos tradicionales a los que se les aplica una gestión novedosa como el sharing". Por ello, remarcó que tendrán que ser "eléctricos, de emisiones 0".
En esta misma línea, destacó que “está comprobado en estudios que se han hecho en ciudades europeas donde ya se ha realizado este tipo de actuaciones que, por cada elemento de sharing, se produce en 5 años el efecto de retirada de tres vehículos”. Por lo tanto, “una moto eléctrica utilizada en esta modalidad supone que, en 5 años, tres personas que usaran sus vehículos individualmente dejen de hacerlo porque les resulta más cómodo,incluso más rentable económicamente”.
De esta manera, “se contribuye a la sostenibilidad y a la movilidad del tráfico en la ciudad”, ha indicado Ramón Vilar. Se trata de “una apuesta por la innovación; por el transporte público, pero más allá del tradicional. Ciudades como Madrid, Barcelona o Zaragoza ya han ordenado esta actividad”.