València retoma el objetivo de acabar con las gasolineras de Ciutat Vella

VALÈNCIA. “Las tenemos en mente, claro que las tenemos en mente”, comenta el concejal de Movilidad Sostenible del Ayuntamiento de València, Giuseppe Grezzi. Las tres gasolineras de Ciutat Vella, ubicadas en espacios emblemáticos de la ciudad, están en el punto de mira del Govern de la Nau. Ya no es sólo un cuestión estética; es también histórica. Una de ellas, concretamente la ubicada en la Plaza de Tetuán, pone en peligro la supervivencia de uno de los árboles históricos de la ciudad de València, el ficus del Parterre.

Las gasolineras están en el Parterre, en Guillem de Castro y en la calle Xàtiva, junto al colegio Luis Vives. La de Guillem de Castro está previsto que se elimine en cuanto se ponga en marcha el plan de protección de Bienes de Interés Cultural del Jardín Botànic y las Torres de Quart. En él, la gasolinera se va fuera, y se suprime la vía de servicio que se transformará en un espacio peatonal. El plan tuvo una primera exposición en público y después, tras las alegaciones de los vecinos, volvió a exponerse en mayo de este año.

En principio la aprobación provisional del plan será en septiembre. Una vez votado por el pleno del Ayuntamiento, el plan especial será remitido a la Comisión Territorial y estaría ya aprobado aproximadamente para enero, explicaron fuentes de Urbanismo.

Para poder trasladar la gasolinera se tendrá que firmar un convenio o abonar una indemnización con la empresa propietaria. Este extremo fue recogido en la documentación adicional que se incorporó en el plan aprobado por el pleno municipal ordinario del pasado mes de mayo. Es prácticamente seguro, pues, que antes de que acabe la legislatura desaparecerá la gasolinera de las Torres de Quart, “aunque nunca hay que pillarse los dedos con las fechas”, comentan desde Urbanismo.

Convenios bajo la lupa

Con quien ya había un preacuerdo era con los propietarios de la estación de servicio de la plaza Tetuán. En su día, explicaron fuentes del Ayuntamiento de València, se paralizó dicho convenio firmado por el gobierno del PP por considerar que era excesivamente ventajoso a los propietarios ya que ofrecía una concesión demasiado larga a la empresa, que podría instalar su estación de servicio en Tarongers.

“Estamos mirando la documentación y tenemos que analizar muchas cosas”, comentó Grezzi. Con todo, el concejal da por seguro a Valencia Plaza que en breve avanzarán sobre esta cuestión. Igualmente sucederá luego con la gasolinera de la calle Xátiva, junto a la plaza de Toros y el colegio Luis Vives. Para ésta se había previsto también ofrecer a los propietarios suelos en la Ronda, pero una de las críticas que hizo en su día la oposición, que ahora gobierna el consistorio, es que no se podía caer en la tentación de llenar de estaciones de servicio los bulevares de la ciudad.

Curiosamente, ambas gasolineras eran las que en principio antes iban a salir del centro histórico, pero al final será la de las Torres de Quart la que, tal y como está la burocracia y papeleo que la rodea, la que antes desaparezca de la calle y pase a convertirse en un recuerdo.