Tanto la Comunitat como la ciudad de València se mantienen en un segundo plano y solo tres iniciativas se sitúan en el top 80
VALÈNCIA. Todos los años por estas fechas, el panorama cultural valenciano pasa examen y de los duros. Después de dar datos de asistencia y presentar programaciones, desde 2009 La Fábrica publica los resultados del informe anual del Observatorio de la Cultura, una encuesta que se realiza a agentes culturales de diferente naturaleza seleccionados de todas partes de España. De ahí justamente parte su interés, de ser una buena manera de radiografía cuánto importamos más allá de las fronteras autonómicas, y si algo se puede decir (de una manera sosegada) tanto de la Comunitat como de la ciudad de València es que su situación esta 'en movimiento'. Hace dos años, con algunos cambios profundos ya puestos a andar y otros aún por definir, la posición tanto de la Comunitat como de València no salió muy bien parada quedando en séptima posición y por detrás de San Sebastián, Málaga o Sevilla. El año pasado, la euforia se desató al dispararse en el ranking y quedar en cuarta posición al superar de una a las tres ciudades citadas, además de aumentar la mayoría de las puntuaciones de todos los centros evaluados, especialmente Bombas Gens y el IVAM.
Este año, la Comunitat y la ciudad de València han vuelto ha pasar por el filtro de más de mil panelistas de primer nivel (escritores, artistas, directores y actores, músicos, arquitectos y creadores de todos los campos; responsables de fundaciones, directores de museos, centros e instituciones culturales; editores, productores, promotores, galeristas y responsables de industrias culturales; comisarios de exposiciones, gestores culturales y profesionales del sector, así como responsables de áreas e instituciones culturales de la administración pública central, autonómica y municipal) y el resultado no es ni tanto ni tan poco, sino el estancamiento. El porcentaje que forma la lista se calcula por el tanto por ciento de panelistas que mencionan la región, ciudad o iniciativa particular. La Comunitat cede terreno, pero únicamente dos décimas, pasando del 33,7% al 33,5%. Mantiene así la quinta posición, por detrás de Madrid (87,2%) País Vasco (57,6%), Cataluña (52,1%) y Andalucía (38,7%). Justo por detrás queda Castilla y León, en una distancia considerable, ya que solo llega al 15,5% (18% de diferencia). La tendencia de todas las comunidades de estos puestos más relevantes ha sido el estancamiento y la caída más pronunciada es la del País Vasco. La Comunitat cuenta con un histórico… movido, empezó el estudio en 2009 con un 26%, fue superado por Andalucía en 2012 al sumar únicamente un 20% pero su mínimo lo marcaría en 2013 con un pobre 9,5%, desde entonces ascendió paulatinamente hasta el 17,9% de 2016 y duplicó de un año para otro su valoración el año pasado con ese 33,7%. Desde aquel olvidable 2013, es el primer informe en el que se registra un retroceso.
En el terreno de las ciudades, la situación está mucho menos igualada. València consigue una más que aceptable cuarta posición con un 42,1%, por detrás de Madrid (92,5%), Barcelona (64,5%) y Bilbao (61,0%). Por debajo y con tan solo un 1,2% de diferencia se posiciona Málaga, así que actualmente está en una posición más cercana a ser alcanzada que a promocionarse (la diferencia con Bilbao es del 18,9%). Para encontrar a Alicante hay que empezar por la cola: está en penúltima posición -la 31º- con un 2,2%, por debajo de Cuenca (2,5%) y solo por encima de Córdoba (1,9%). Castellón no aparece ni siquiera considerada en la lista. En cuanto a la evolución en el histórico, València se estanca como la Comunitat, y a diferencia que los registros por comunidades autónomas, el resto de ciudades suben de manera pronunciada: Madrid lo hace un 6,9%, Barcelona un 7,6%, Bilbao un 9,3% y Málaga un 5,3%, mientras que València solo lo hace un 1,5%.
La posición y el estancamiento de la ciudad se puede entender en términos de tamaño y población, pero el estudio también refleja que los sectores culturales mejor valorados son la gastronomía y el diseño, dos ámbitos en los que se supone que València y la Comunitat son referencia nacional.
Siguiendo con los panelistas a nivel nacional, el estudio refleja un aspecto preocupante del panorama cultural valenciano visto a ojos de los agentes del sector a nivel nacional. Si bien la región y la ciudad no están en mala posición, no hay muchas iniciativas que destaquen en la lista que enfrenta a todos los proyectos creativos del Estado. De hecho, solo se encuentran tres proyectos en los primeros 86 puestos de la lista.
Para encontrar el primero, hay que esperar hasta llegar al número 30, donde se encuentra el IVAM, ya por debajo de nueve iniciativas madrileñas, seis catalanas y cinco vascas. En el puesto 33 entra con fuerza en el estudio el Centre del Carme, que se sitúa justo por encima de Bombas Gens, que pierde 13 posiciones a pesar de que la caída en términos porcentuales no es tan pronunciada (pasa de un 4,2% a un 3,4%).
A partir de ahí, y en las siguientes 30 referencias, no habrá ninguna valenciana, ni alicantina, ni castellonense. La referencia cultural valenciana a nivel estatal se conforma con estos tres centros, mientras que otras comunidades autónomas cuentan no solo con más espacios y proyectos, sino con una mayor variedad en las propuestas (hay desde festivales hasta teatros).
Otro punto que destacar del informe presentado por Fundación Contemporánea es el ranking que conforman los panelistas de la Comunitat Valenciana. Aquí repiten otra vez podio el IVAM (54%), Centre del Carme (42%) y Bombas Gens (38%), que mantienen sus posiciones del ranking del año pasado y que en todo caso, mejoran sus porcentajes (el IVAM es el caso más paradigmático y encara su 30º anviersario con una subida del 16%). El MACA y el Teatro Principal de Alicante se quedan a las puertas del podio y La Nau, que desapareció el año pasado de esta lista, vuelve con un destacable 17%. También entra en la lista el festival urbano Cabanyal Íntim, con un 10% y el Teatro Principal de Castellón con un 13%.
En negativo, hay dos ausencias que se repiten que son muy destacables, ya que son dos de los centros con mayor dotación de dinero público: el Palau de les Arts y el Museo de Bellas Artes de València. Además el Palau de la Música, que ha desarrollado durante estos años un ambicioso programa para abrirse a diferentes géneros musicales, sufre un importante revés al perder el 16% de aceptación y pasar de un 29% a un 13% en tan sólo 365 días, es decir, la mitad de su popularidad.