El dichoso virus ha obligado a los cocineros a tomarse unas vacaciones forzosas y les ha regalado el bien más escaso del que carecen: tiempo.  Tiempo para estar con sus hijos, para bajar el ritmo, para olvidarse de los horarios infernales, dormir, descansar y también comprar y cocinar con tranquilidad en el hogar. Muchos de ellos me han confesado, que una vez pasado el shock inicial, se dieron cuenta de cuánto lo necesitaban. 

Queríamos saber dónde van a hacer la compra y qué suelen comer ahora que no la luz de sus restaurantes está apagada y les hemos lanzado estas preguntas. 

 1. ¿Dónde haces la compra desde que empezó el confinamiento?
2.  ¿Qué es lo que más estás comiendo estas semanas?
3.  ¿Estás comprando algo que antes no solías comprar? ¿Algún capricho extra?
4.  ¿Has pedido comida a domicilio desde que esto empezó? 

Julio Colomer (Ciro)

1. "Sigo comprando en los mismos comercios de siempre... El pescado aprovecho para sacar cosas que tuve que congelar cuando cerramos, a una semana vista de las fallas. La verdura la sigo comprando en mi frutero del barrio, a él le llamo y me lo trae a casa. Ha aumentado sus pedidos a casa en un 75%. Con la carne me pasa un poco como con el pescado, pero le pido a Lloris algunas cosas y me paso por el obrador que lo tienen a 200 metros de mi casa. También me gusta comprar en Arturo, un ultramarinos a la vuelta de la esquina del restaurante, la calle que da a la plaza de la Iglesia de Campanar. Son un matrimonio que tienen la tienda toda la vida y tiene todo tipo de productos. En cuanto a productos no perecederos nos abastecemos de mayoristas. Intentamos evitar las grandes superficies (supermercados) por varios motivos, entre ellos para ver si de esta crisis salen más fortalecidos los pequeños comercios del barrio".