VALÈNCIA. El sector empresarial de Riba-roja de Túria observa con cierto "nerviosismo" la evolución de este segundo episodio de lluvias que azota la provincia de Valencia en los últimos días. Aunque la situación se mantiene dentro de unos parámetros normales, el recuerdo de la Dana del 29 de octubre ha generado una "psicosis generalizada" en el tejido industrial del municipio, según reconoce el gerente de la Asociación de Empresarios de La Reva (Asocreva), Carlos Peinado, a Plaza.
"Estamos viendo cómo evoluciona el temporal con cierta preocupación, pero, por el momento, no hay incidencias significativas en el polígono", explica Peinado. "Sí hubo problemas puntuales en el Parque Logístico Valencia (PLV), con unas balsas que no funcionaban correctamente, pero ya se ha solucionado", añade. Sin embargo, el temor persiste entre los empresarios y sus empleados, por lo que algunos han optado por el teletrabajo durante estos días y otras empresas han aplicado medidas de autoprotección, tales como "barreras antiinundaciones".
Desde el Ayuntamiento de Riba-roja, fuentes municipales aseguran a este diario que la situación está controlada y que el caudal del río Turia se mantiene en "niveles normales". No obstante, como medida de precaución, el puente provisional construido por el Ejército de Tierra el pasado mes de noviembre se mantiene cerrado al tráfico. "No hay peligro inminente de desbordamiento, pero se ha tomado esta decisión por prevención, ya que es una infraestructura temporal situada a cota cero sobre el río", apuntan desde el consistorio.

- Puente habilitado por la UME en Riba-roja -
- Foto: VP
Además, el dispositivo municipal incluye la suspensión de actividades lectivas y deportivas, el cierre de parques y cementerios, así como la recomendación del teletrabajo para los empleados públicos. Del mismo modo, aseguran que se mantiene una coordinación constante con la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y la Generalitat Valenciana para evaluar la evolución del temporal y activar las medidas necesarias en caso de que la situación se agrave.
Agilizar las obras pendientes en el barranco del Poyo
Dado que este jueves se prevé como la jornada más intensa del episodio de lluvias y, ante un posible aumento del caudal del Turia y de los barrancos del Poyo y el Pozalet, el Ayuntamiento de Riba-roja ha reforzado el monitoreo de las zonas de riesgo y ha activado el Centro de Coordinación Operativa Municipal (Cecopal), en el que participan técnicos municipales, cuerpos de emergencia y administraciones autonómicas.
Estos tres cauces son puntos clave en el sistema de drenaje del municipio y, tras los efectos de la Dana de octubre, cualquier incremento significativo del caudal genera preocupación entre la población y los empresarios del área industrial de Riba-roja. Por ese motivo, la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, visitó este lunes la localidad para conocer de primera mano la situación y aseguró al consistorio que trasladaría a la CHJ la importancia de acelerar los proyectos hidráulicos pendientes.
Sigo con mucha atención la bajada del río Turia a su paso por Riba-roja: se ha cortado el puente provisional que puso la @UMEgob y mantengo comunicación constante con el alcalde @RobertRaga @ayto_riba_roja .
— Pilar Bernabé /❤️ (@pilarbernabe) March 3, 2025
Mucha precaución, por favor. Y, sobre todo, seguid las recomendaciones… pic.twitter.com/nwAZcpvQln
"Se han solicitado medidas urgentes para evitar que el polígono industrial vuelva a sufrir las consecuencias de una inundación como la de octubre", subraya el ayuntamiento, desde donde insisten en la urgencia de que esta entidad debe agilizar cuanto antes las obras previstas para mejorar la canalización de los barrancos y reducir el riesgo de inundaciones en la zona industrial de Riba-roja, considerada el "núcleo logístico" de la provincia.
Por su parte, Peinado también incide en la necesidad de que se acometan estas actuaciones por parte del organismo estatal, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico. "Desde la Confederación nos trasladaron que hay siete intervenciones planificadas en distintos puntos de la cuenca, pero el problema es que la ejecución completa de estas obras puede tardar hasta cinco años", lamenta.
Según explica, la intención es conectar el barranco del Poyo con el nuevo cauce del Turia para mejorar la evacuación del agua en episodios intensos de lluvia. "Nos han asegurado que estas infraestructuras reducirán en gran medida el riesgo de inundaciones, pero hasta que se ejecuten seguimos expuestos", advierte.
Los accesos al polígono, otro de los problemas
El plan de acción municipal también incluye la comunicación permanente con las empresas de la zona a través de Riba Activa Empresas. "Estamos recibiendo información en tiempo real sobre el estado de las carreteras y la evolución del temporal, lo que nos permite tomar decisiones con rapidez", señala Peinado. No obstante, el gerente de Asocreva insiste en que el problema de fondo sigue siendo la falta de infraestructuras adecuadas para evacuar el agua en temporales de esta magnitud.

- El alcalde de Riba-roja, Robert Raga, visita junto a la Policía Local el polígono industrial de La Reva-Foto: AYUNTAMIENTO DE RIBA-ROJA
En ese sentido, destaca que, aunque se han proyectado obras de mejora en el barranco del Poyo, su ejecución completa aún está por definirse. "Mientras tanto, seguiremos pendientes del cielo", apostilla Peinado. A esta problemática, se suma la falta de accesos alternativos al polígono de La Reva, una situación que complica su evacuación en caso de emergencia.
"La zona depende de una única salida, lo que genera cuellos de botella en situaciones críticas", explica el gerente de Asocreva. Y, aunque la construcción de una segunda vía de evacuación ha sido reactivada de forma reciente por el ayuntamiento tras años de parálisis, el proyecto continúa en fase de licitación. "Hasta que esta infraestructura sea una realidad, el polígono continuará siendo vulnerable ante episodios de lluvias extremas", concluye.