VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Sagunto ha suspendido la concesión de nuevas licencias para viviendas turísticas durante un mes. La medida, que entra en vigor esta semana tras su publicación en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV), supone un parón en seco a la implantación de este tipo de alojamientos mientras se tramita una modificación urbanística que busca limitar su crecimiento y clarificar dónde se podrán ubicar en el futuro.

Según una resolución de Alcaldía, fechada el pasado 9 de junio, durante este periodo no se tramitarán nuevas solicitudes para transformar viviendas en apartamentos turísticos ni se emitirán los informes previos que se necesitan para iniciar la actividad. El objetivo es ganar tiempo para redefinir el actual marco normativo, evitar que se registren nuevas altas y proteger el equilibrio de los barrios del municipio más tensionados. 

La decisión llega después de que, el verano anterior, el pleno del Ayuntamiento de Sagunto acordara estudiar cómo regular el avance de este fenómeno. En aquella sesión, todos los partidos coincidieron en la necesidad de analizar alternativas tras constatar un crecimiento sostenido de este tipo de alojamientos.

Solo en 2024, el número de pisos turísticos en Sagunto se duplicó y, hasta mayo de ese año, ya se concedieron 169 licencias más. Una cifra que hizo prever que, de no actuar, se superaría el millar antes de final de año. La moción fue presentada por el grupo Iniciativa Porteña (IP) y defendida por el edil, Manolo González, que, tras una enmienda del PSPV, fue aprobada por unanimidad.

¿Qué cambios propone el Ayuntamiento de Sagunto?

El nuevo planeamiento urbanístico que ha elaborado el consistorio prevé, entre otros cambios, que las viviendas turísticas no puedan abrirse en las plantas bajas de los edificios residenciales, una fórmula que se había generalizado en algunas zonas del municipio. De esta forma, el Ayuntamiento quiere evitar que los locales comerciales "de toda la vida" desaparezcan para dar paso a alojamientos de corta estancia, lo que afecta al tejido social del barrio.

Asimismo, se limitará su presencia en suelos comerciales o terciarios, aunque en ellos se permitan usos hoteleros, y solo se autorizarán cuando se trate de bloques completos gestionados por una única empresa. En ese sentido, la resolución señala que se aclarará por escrito que los pisos turísticos no podrán beneficiarse de las ventajas urbanísticas que sí se aplican a los hoteles, como "las bonificaciones por uso o los incrementos de edificabilidad".

Cabe recordar que la suspensión no afecta a las licencias que ya se han concedido ni aquellas solicitudes que se ajusten tanto a la normativa actual como a la futura. No obstante, sí frena cualquier intento de aprovechar este momento de transición para colar nuevas altas antes del cambio definitivo.

Con la suspensión, Sagunto se suma a la lista de municipios que comienzan a poner límites a la expansión de los pisos turísticos, sobre todo, en zonas residenciales donde su crecimiento puede alterar la convivencia o presionar el alza los precios de la vivienda. De hecho, también en la comarca del Camp de Morvedre, el Ayuntamiento de Canet d'en Berenguer optó por congelar las licencias de uso turístico bajo el mismo objetivo: paliar la tensión en el mercado inmobilario local.