VALÈNCIA. Este jueves tendrá lugar en Les Corts Valencianes el pleno de investidura para que el diputado del PP Juanfran Pérez Llorca sea designado nuevo presidente de la Generalitat en sustitución de Carlos Mazón, que renunció semanas atrás al cargo.

El adiós del jefe del Consell vino precedido de un estrechamiento del cerco judicial al relato sobre su papel en el día de la Dana y con su comparecencia en las comisiones de investigación de Les Corts y del Congreso en el horizonte.

La salida de Mazón no ha frenado que sigan apareciendo informaciones respecto a su papel -o la ausencia del mismo- en la trágica jornada ni tampoco que las novedades relacionadas con el todavía presidente en funciones dejen de ser noticia.

De hecho, en los últimos días ha terminado de desmontarse una de las mentiras que había formado parte del relato desde prácticamente el inicio. Durante meses, la versión oficial de Presidencia había señalado que, después de la comida en El Ventorro con la periodista Maribel Vilaplana, Mazón se marchó al Palau, donde llegó en torno a las 18 horas y estuvo trabajando para, posteriormente, acudir al Cecopi pasadas las 19 horas.

Fue el propio jefe del Consell quien se encargó de aclarar en febrero, con imagen incluida de las cámaras de seguridad, que llegó al centro de emergencias a las 20.28 horas, por lo que no se encontraba en el recinto cuando se tomó la decisión de enviar el ES-Alert, una cuestión importante dado que en estos meses una de las prioridades de Mazón ha parecido consistir en esquivar cualquier responsabilidad sobre la orden de mandar el mensaje para avisar a la población. 

Preguntado en aquel momento por este cambio de versión, el presidente de la Generalitat espetó a los medios: "No entiendo el cambio de versión. A las 20.28 es después de las 19.30, es un hecho fáctico".

Concretado, no sin cierto desgaste para el jefe del Consell, este punto, el relato oficial se mantuvo en la llegada al Palau por parte de Mazón en torno a las 18 horas, dado que nunca se desmintió ni modificó esta versión desde Presidencia. Ahora bien, en junio, atendiendo a preguntas por escrito realizadas en Les Corts por Compromís sobre los horarios concretos de Mazón en aquella tarde fatídica, el secretario autonómico de Relaciones Institucionales y Transparencia, Santiago Lumbreras, ya evitaba poner negro sobre blanco el horario en el que el presidente había llegado al Palau: "Después del almuerzo de trabajo, el presidente acudió a su despacho en el Palau de la Generalitat, desde donde se trasladó al Cecopi".

Esta manera de responder elevó de nuevo la duda sobre si realmente Mazón había llegado al Palau a las 18 horas tal y como se había transmitido. Resulta evidente, que cuando un político quiere terminar con una polémica y tiene las herramientas para ello (como en el caso de su llegada al Cecopi exhibiendo un fotograma de la cámara de seguridad), se preocupa de cerrarla cuanto antes. En cambio, la respuesta dada por Lumbreras seguía indicando que había una laguna en el relato.

Semanas atrás, eldiario.es y El País publicaron diversas informaciones en las que señalaban que, según testigos presenciales, Mazón habría llegado al Palau en torno a las 20 horas. Este periódico habló con una de las personas que confirmaba haber visto al presidente de la Generalitat pocos minutos de esa hora caminando por la calle Caballeros en dirección a la entrada del Palau.

Todo ello concuerda con la información trasladada al juzgado respecto a la salida de Vilaplana del céntrico aparcamiento de La Glorieta, fijada a las 19.47 horas por el pago del ticket. Así, el relato ahora vigente señala que ambos salieron entre las 18.30 y las 19 horas del Ventorro, pasearon juntos hasta el parking y estuvieron charlando un tiempo -que deberían ser unos 30 minutos- en la superficie.

Más allá de que esta versión sea la absolutamente real y definitiva -este miércoles Levante-EMV publicaba que la periodista habría acercado en coche al presidente a las inmediaciones del Palau, algo que Mazón desmintió-, lo que resulta confirmado es que el presidente nunca llegó al Palau a las 18 horas como se dijo inicialmente, ni tampoco a las 19 horas, sino más bien sobre las 20 horas. Una falsedad que puede considerarse grave, no sólo por lo trágico de la jornada, sino también por el mantenimiento en todo este tiempo de una versión incierta. Es más, preguntado la semana pasada en la comisión del Congreso sobre dónde estaba a las 19.40, respondió que "probablemente" se encontraba en el Palau.

Sin embargo, este miércoles, el propio presidente en funciones casi terminaba por admitir a preguntas de los periodistas que la hora de llegada a la Generalitat podría haber sido más tardía: "Vine andando directamente al Palau de la Generalitat sin hacer ninguna parada, sin entrar en ningún otro sitio (...) Lo que sí que sé es que se dice que llegué a las ocho, y yo lo que sí que sé es que a las ocho estaba saliendo de aquí hasta L'Eliana -donde se ubica el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat-. Así que nada más", zanjó.