VALÈNCIA. El procedimiento para que las familias elijan la lengua base en la que se impartirá la mayor parte de la docencia de sus hijos a partir del próximo curso arrancará el próximo 25 de febrero a las 09.00h y terminará el 4 de marzo a las 14.00h. Así se desprende de la orden publicada este mismo lunes en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV). 

La nueva Ley de Libertad Educativa establece que los estudiantes que se escolaricen por primera vez elijan la lengua base en el procedimiento de admisión. Mientras que para los ya escolarizados se debe realizar una consulta en la que pueden participar las familias de alumnos de centros públicos y concertados de los siguientes niveles: segundo ciclo de Educación Infantil, Educación Primaria o Educación Secundaria Obligatoria. En ella, será suficiente con que vote un representante legal por cada alumno. La lengua que se elija como base en cada clase será la que tenga "un mayor peso y una mayor presencia en la enseñanza".

Los centros entregarán a los representantes de los alumnos una copia del anexo de la orden (que recoge la información básica sobre el proceso) y una ficha del alumnado con el número de identificación del alumnado (NIA) y datos sobre las personas que constan como representantes legales en un máximo de cinco días hábiles El censo provisional para las votaciones se publicará el lunes de la próxima semana. Se podrán presentar reclamaciones hasta ese mismo viernes y el censo definitivo se dará a conocer el 24 de febrero, un día antes de que arranque la elección. 

Proceso de elección

El proceso de elección se realizará a través de la Secretaría Digital de la Generalitat, es decir, por la misma aplicación que se utiliza para el proceso de admisión del alumnado. Cada familia generará una clave tras identificarse con su DNI, NIE o certificado digital y entrará en la aplicación. Para ejercer la votación, se introducirá el NIA del alumno y se podrán introducir datos sobre circunstancias personales que se tendrán en cuenta a la hora de ordenar el alumnado para adscribirlo a la lengua base y que son los siguientes

- Número de hermanos en el mismo centro: 15 puntos por hermano

- Domicilio del alumno: 10 puntos en área de influencia y 5 puntos en área limítrofe

- Discapacidad: 4 puntos entre 33% y 64%, y 7 puntos entre 65% y 100%

- Familia numerosa o monoparental: 3 puntos categoría general y 5 puntos categoría especial

En el caso de que una familia realice más de un voto por estudiante, se pueden producir dos escenarios distintos. Si los representantes legales eligen diferente lengua base, los votos no se tendrán en cuenta para el proceso. Mientras que, si eligen la misma lengua, computará como una única solicitud. Es por este motivo que la orden indica que será suficiente con que vote un representante legal.

La Generalitat, además, establece que las personas afectadas por la Dana que no tengan acceso a medios electrónicos para participar en la consulta lo hagan desde los centros educativos próximos a sus casas. En este sentido, establece que estos enclaves pondrán a disposición de las personas afectadas "un espacio provisto de algún ordenador con conexión a Internet" mientras dure el proceso de elección de la lengua.

Efectos de la consulta

Según indica la Conselleria de Educación, el objetivo de este procedimiento es determinar el porcentaje de representantes legales del alumnado que optan por una u otra lengua en cada centro docente y nivel educativo. En este sentido, en las zonas de predominio lingüístico castellano en las que exista una "demanda de alumnado suficiente para constituir una unidad" de valenciano, la conselleria podrá habilitar alumnado, dotar de profesorado o acometer otras medidas "para satisfacer la demanda". "El resultado de la consulta, en ningún caso, podrá suponer una minoración del número de unidades, personal docente y recursos en los centros públicos", recoge la orden. 

Mientras que en los municipios de predominio lingüístico valenciano esta consulta determinará el número de unidades que se ofertará en cada lengua base para el próximo curso a partir del porcentaje de representantes legales que hayan optado por cada lengua. En este caso, se aplicará la tabla prevista en el Anexo I en la Ley de Libertad Educativa. En ella, será considerada como lengua A la que haya obtenido más votos en la consulta y dividirá el número de unidades en cada lengua en función de los resultados de la consulta. En caso de empate a votos entre valenciano y castellano, se considerará como lengua A el valenciano, al ser la lengua de predominio en el territorio donde se establece el centro educativo. 

Cabe tener en cuenta que, si la elección se produce en el último nivel de un centro que esté adscrito a otro, el resultado de la consulta se aplicará en este último a partir del próximo curso. En el caso de que este centro reciba a alumnado de varios enclaves, se ponderará el resultado de la consulta entre todos ellos. Mientras que en el caso de los centros rurales agrupados y de los centros incompletos se tendrá en cuenta el resultado de todos los niveles de la agrupación. 

Adscripción del alumnado

Una vez estén constituidas las unidades que habrá en cada lengua base en cada centro y nivel, se procederá a adscribir al alumnado en cada una de ellas por el orden del listado de alumnos que generará el sistema ITACA según la elección de sus representantes y la puntuación obtenida en el apartado de las circunstancias personales. 

Este listado se publicará en el tablón de anuncio de cada centro docente. Además, las personas interesadas tendrán a su disposición una copia de los mismos a través de la dirección de los centros públicos y la titularidad de los privados concertados. 

La orden, no obstante, da potestad a los centros para que desdoblen áreas y materias con el fin de que "todo el alumnado pueda cursar sus enseñanzas en la lengua base elegida por sus representantes". Los estudiantes que repitan curso tendrán derecho a ser adscritos en la lengua base que le corresponde, en función de la elección de sus representantes y el orden en el listado según sus circunstancias personales. 

Si los representantes de un alumno no participan en la consulta o sus votos no se tienen en cuenta, se adscribirá de oficio una u otra lengua por parte del centro docente. "En esta adscripción se ponderarán como criterios las posibilidades organizativas del centro, las preferencias de los representantes legales del alumnado, y en caso de desacuerdo entre ellos, la continuidad en la misma lengua base", recoge el documento. 

Rechazo de PSPV y Compromís

Cabe mencionar que el de la elección de la lengua es uno de los puntos de la nueva norma educativa que mayor crítica ha recibido por parte de los partidos de la oposición, así como parte de la comunidad educativa. Tras conocerse las fechas en las que tendrá lugar el proceso, PSPV y Compromís han insistido en su rechazo a este proceso, que los socialistas han calificado como "ataque" al valenciano, mientras la coalición ha expresado que "no tiene nada a ver con la libertad educativa". 

En este sentido, el portavoz de Educación del PSPV-PSOE, Jose Luis Lorenz, ha apuntado: "Con esta propuesta los directores y directoras ya no tendrán en cuenta criterios pedagógicos a la hora de hacer grupos sino que primará la elección de una lengua frente a la elección pedagógica". Por su parte, el portavoz de Educación de Compromís, Gerard Fullana, ha señalado:  “Lo que se pretende es que una parte del alumnado no aprenda una de las dos lenguas oficiales y habrá decenas de miles de familias que no tendrán la opción elegida, mayoritariamente las familias que eligen enseñanza en valenciano. Esta orden se votará la primera semana de marzo y esto dificultará mucho la matrícula en los centros educativos".

"Lo que pretende es que se hable de otra cosa, que no se hable de las responsabilidades de gestión de la DANA, que no se hable del incumplimiento de la sentencia del TSJCV que obliga a la Consellería a incorporar 1.900 docentes en los centros educativos. Se pretende despistar, nuevamente, con una batalla lingüística en el corazón de la educación", ha añadido Fullana en declaraciones a los medios de comunicación.