BANYERES. Trabajadores de la textil Belda Llorens, en Banyeres, han salido a la calle este viernes para reivindicar justicia después de cuatro meses de incertidumbre laboral, lo que también supone incertidumbre económica, puesto que se encuentran en situación de permiso retribuido pero el pago de los salarios ha venido sufriendo demoras. Ahora están al día, puesto que el pasado miércoles cobraron el mes de mayo, "supongo que en un intento de que se desconvocara esta manifestación", tal y como ha explicado Antonio García, secretario del comité de empresa de R. Belda Llorens, "pero no hemos anulado nada porque la situación es la misma, estamos en casa, sin trabajar, nos pagan cuando quieren". Desde el comité piden que se resuelva el tema, que si la empresa va a cerrar que se resuelva la situación de los trabajadores, "que nos paguen y nos despidan, así podremos cobrar el paro. Actualmente hay muchos trabajadores que no pueden pasar el mes".

La situación actual de la empresa, que presentó un ERE y lo retiró tras cerrarse su negociación sin acuerdo, apunta que la práctica totalidad de los trabajadores se encuentran en situación de permiso retribuido, tratándose de una plantilla inicial de 103 empleados, si bien dos trabajadores se han jubilado y un tercero ha solicitado la baja voluntaria. La abogada que representa a unos 65 trabajadores, que no ha podido estar presente, sí les ha remitido un escrito al que han dado lectura, y en el que manifiesta que la empresa solicita concurso de acreedores voluntario, algo que considera "dudoso y sospechoso" por diferentes razones.

Por una parte, "han podido pagar las nóminas de mayo, por lo tanto no hay impago alguno que no puedan afrontar hasta la fecha", y por otra el hecho de que "desde el principio se nos planteó una supuesta situación de insolvencia de las empresas que no se ha demostrado a resultas de la persistente ocultación y de las averiguaciones patrimoniales realizadas, que fueron negadas por las empresas", como remarca la abogada en el escrito al que han dado lectura, y donde añade que "a resultas de ello, también se ha acreditado que las empresas nos han engañado cuando han negado su consideración como grupo de empresas, para justificar su supuesta insolvencia y eximirse de su responsabilidad con los trabajadores, cuando sin embargo ellos mismos han firmado como grupo empresarial para que los trabajadores trabajaran indistintamente en sus empresas y ahora no quieren que dicho grupo de empresas asuma su responsabilidad laboral".

Igualmente, tanto la abogada como el secretario del comité de empresa han apuntado a un presunto alzamiento de bienes, y la letrada ha denunciado que "ante la gravedad de los hechos acaecidos por ocultación y cese de los administradores por ello, estamos en una presunta situación de alzamiento de bienes y administración desleal, que se ha justificado documentalmente y vamos a tomar las medidas penales oportunas desde nuestro despacho ante el patente perjuicio ocasionado por no asumir su responsabilidad ante los trabajadores".

De momento, "apelamos a la más digna consideración de las empresas y los empresarios de esta familia … que las administran... para que el próximo 30 de junio logremos un acuerdo ante el SMAC y evitarle una lluvia de demandas y denuncias conforme a derecho corresponde", según explica la abogada, Yolanda Albero, quien asegura que se sienten "engañados por la empresa", y en función de lo que suceda presentarán una serie de demandas, entre ellas por presunto alzamiento de bienes.

El secretario del comité de empresa ha recordado el caso que vivió la empresa Fénix, propiedad de Belda Llorens, que "dejó a los empleados durante 16 meses sin cobrar y sin poder acceder al cobro por desempleo y a ninguna ayuda económica". Los trabajadores han denunciado la falta de voluntad por parte de la empresa, incidiendo en que querían llegar a una solución amistosa, como también denuncian la falta de apoyo del sindicato CCOO.