VALÈNCIA. El PSPV-PSOE liderado por Ximo Puig sufrió este domingo un durísimo golpe en las urnas. La formación socialista, pese a que mejoró los resultados de 2019, no logró retener la Generalitat debido a diversos factores: el efecto 'President' no funcionó como los socialistas esperaban, los socios del Botànic, Compromís y especialmente Podem-EU, no respondieron a las expectativas, y el PP se disparó con una ola que se hizo notar en toda España.
Más allá de que los populares valencianos con Carlos Mazón al frente se beneficiaran de la animadversión evidente -los resultados electorales así lo demuestran- que ha despertado en los últimos tiempos el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lo cierto es que el PPCV supo acertar también en las claves y mensajes de campaña, mientras que en el PSPV se respiró un clima de falta de claridad en la forma de encarar los comicios; con demasiadas voces -de dentro y fuera del partido- que no concretaron una línea estratégica clara a la hora de encarar las semanas previas a la cita electoral. No obstante, Puig subió cuatro diputados respecto a 2019, pero fue insuficiente ante el ciclón del PP y la falta de respuesta de Compromís y Podem-EU.