VALÈNCIA. Los núcleos de Campanar y Beniferri se convirtieron, a finales del siglo pasado y especialmente con el cambio de siglo, en uno de los ámbitos de València de mayor expansión urbana con el desarrollo de anchas avenidas y la construcción de densas promociones de vivienda. El crecimiento hacia el noroeste de la urbe, al calor del 'boom' inmobiliario, acabó fagocitando los históricos nodos de población pero dejó a su paso varios vacíos urbanísticos que todavía quedan por completar. El Plan Especial de Campanar que va a sacar a exposición pública el Ayuntamiento de València ya incluye, entre otros, los cambios necesarios para su culminación.
Acabar con el 'vacío' en Pío XII
Uno de los más notorios, a la entrada del distrito, es visible desde Nuevo Centro, en la avenida Pío XII. Presidido por numerosas vallas publicitarias y convertido en aparcamiento improvisado en un tetris de fincas, se trata, según recoge el Plan Especial, de un sector "degradado que no se ha desarrollado debido a las altas cargas urbanísticas que suponía su desarrollo", pero su reordenación urbanística ya está en trámite desde que hace unos años la Inmobiliaria Guadalmedina, propietaria mayoritaria del suelo, impulsara un PAI que ya ha superado su exposición pública.
Con él, se pretende regenerar esta zona con el derribo (previa indemnización y realojo) de hasta ocho edificaciones que actualmente están fuera de ordenación y en un estado "deficiente". Todo ello despejará el terreno para ubicar dos zonas verdes de casi 3.000 metros cuadrados en total, 1.600 metros cuadrados de viales peatonales y cinco bloques de viviendas de hasta 11 plantas que podrán albergar hasta 133 viviendas en su conjunto.