VALÈNCIA. La startup valenciana Kumori Systems ha dado el salto de la nube comercial a la militar con su entrada en el ámbito del ‘cloud of combat’, el nuevo paradigma tecnológico que conectará sensores, plataformas y sistemas de defensa mediante redes seguras capaces de compartir información y ejecutar aplicaciones críticas en tiempo real. La compañía, spin-off de la Universitat Politècnica de València (UPV), se especializa en automatizar el ciclo de vida de las aplicaciones cloud native en infraestructuras como AWS, Azure o Google Cloud, y ahora aplica ese conocimiento al ámbito de la defensa.
Fundada por el ingeniero José Bernabeu, arquitecto jefe de la primera versión de Microsoft Azure y actual director científico del Instituto Tecnológico de Informática (ITI), Kumori desarrolla tecnología propia que permite a empresas ahorrar tiempo y recursos en el despliegue de sus desarrollos en la nube. Su plataforma Axebow, núcleo del sistema, simplifica la puesta en marcha de software en entornos distribuidos y facilita su gestión de forma automatizada y eficiente.
Con esta base tecnológica, Kumori ha diseñado una estrategia integral para el sector Defensa, centrada en las denominadas Nubes de Combate y en la gestión de aplicaciones modernas. La propuesta combina un Cloud OS soberano -una nube independiente-, su plataforma Axebow PaaS y un plano de control unificado para el comando y control de aplicaciones, con especial foco en la resiliencia, la interoperabilidad y la eficiencia energética. "Las operaciones modernas exigen decisiones en segundos y software que maniobre al ritmo de la misión. Con Kumori, las fuerzas pueden desplegar, observar y reconfigurar aplicaciones críticas, desde inteligencia y fusión de sensores hasta defensa contra drones, sobre cualquier infraestructura, del centro de datos", señala Carlos García Blanco, CEO de Kumori.
El contexto geopolítico actual, marcado por la digitalización del campo de batalla y la búsqueda de soberanía tecnológica en Europa, ha acelerado la demanda de este tipo de soluciones. García Blanco explica que la compañía decidió apostar por este segmento al constatar que su tecnología tiene aplicación dual, tanto civil como militar: “Decidimos penetrar en este segmento cuando vimos que nuestra tecnología tiene aplicación dual. En Kumori somos especialistas en tecnologías cloud, y el sector de defensa no es ajeno a esta necesidad. Cualquier aplicación militar necesita infraestructura para poder operar, y es ahí donde entramos nosotros”.
La compañía asegura que el contexto actual la posiciona como la única empresa europea con las capacidades necesarias para ofrecer un ‘stack’ tecnológico completo en defensa. Aunque no puede desvelar nombres por motivos de confidencialidad, García Blanco afirma que Kumori mantiene conversaciones con los principales actores del ecosistema de defensa español, y anticipa que esta línea de negocio “superará en facturación a la civil antes de 2026”.
El plan de la empresa pasa ahora por abrir un programa de despliegues piloto con unidades operativas y grandes contratistas europeos, con el objetivo de validar casos de uso prioritarios en entornos reales y acelerar la madurez tecnológica (TRL) de su plataforma. Estos pilotos se centrarán en mando y control de aplicaciones de misión, defensa de base, coordinación de flotas tripuladas y no tripuladas (MUM-T/ISR) y logística inteligente, todos ellos con requisitos de interoperabilidad aliada y soberanía del dato.
Con esta iniciativa, la compañía valenciana aspira a posicionarse como referente europeo en software de misión y tecnología soberana para las futuras nubes de combate multidominio, un ámbito que marcará la próxima década de la industria de defensa. “Nuestro compromiso es entregar software listo para misión, compatible con estándares aliados y preparado para integrarse en los programas europeos de Nube de Combate Multidominio”, concluye García Blanco.