VALÈNCIA. La rebaja fiscal fue una de las promesas estrella de María José Catalá en campaña y una de las medidas que adoptó al llegar a la Alcaldía de València. Dentro de lo que tanto la alcaldesa como la concejala de Hacienda, María José Ferrer San Segundo, califican como “la mayor rebaja fiscal de la historia del Ayuntamiento”, que incluía, además de una rebaja en tributos como el IBI, la bonificación del 95% en el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IIVTNU), más conocido como plusvalía municipal. Una bonificación que hasta la fecha se traduce en 9,37 millones de euros que han dejado de pagar más de 20.600 beneficiarios.
Cuando se aprobaron estas medidas, la concejala de Hacienda defendió que la propuesta consistía en “aplicar una bonificación del 95% en el caso de heredar una vivienda en la ciudad o un negocio familiar”, lo que, según las estimaciones iniciales, podía beneficiar a cerca de 25.000 valencianos cada año que hasta entonces habían tenido que pagar este impuesto “de forma injusta y poco considerada”. Ferrer San Segundo subrayó, además, que se eliminaban requisitos como la convivencia con el fallecido y que, como novedad, se incluía la bonificación en transmisiones de comercios en vida siempre que se mantuviera la actividad.
“Queremos combatir la injusta plusvalía, ya que los valencianos dejarán de pagar impuestos municipales por heredar y además apostamos por favorecer la sucesión en la empresa familiar y el mantenimiento de empleo, incluso en el traspaso inter vivos. El objetivo es ayudar a las familias y fomentar el empleo y los autónomos”, afirmó entonces la edil.
Beneficiarios
Hasta la fecha, según los últimos datos facilitados por el consistorio, esta bonificación ha beneficiado a un total de 20.657 contribuyentes entre 2024 y 2025, que han dejado de pagar en su conjunto 9,37 millones de euros. En concreto, en 2024 se beneficiaron de esta bonificación 7.549 vecinos, que tributaron en conjunto 3,82 millones de euros menos, con un ahorro medio por contribuyente de algo más de 500 euros.
En 2025, hasta el 31 de agosto, otros 8.207 valencianos aplicaron la rebaja en plusvalías devengadas en 2024, lo que supuso un ahorro de 3,74 millones de euros, es decir, unos 456 euros de media por persona. Además, en el presente ejercicio, con plusvalías devengadas en 2025, ya se han contabilizado 4.901 beneficiarios, que han ahorrado un total de 1,8 millones de euros, lo que reduce la media por vecino a unos 368 euros. A esta cifra se suma la nueva bonificación del 95% en transmisiones inter vivos —aplicable cuando se traspasa un negocio familiar entre cónyuges, ascendientes o descendientes—, que ya ha permitido a cinco contribuyentes ahorrar un total de 2.162 euros.

- María José Catalá y María José Ferrer San Segundo en una junta de gobierno. -
- Foto: EP/ROBER SOLSONA
Plan Económico-Financiero
Cabe recordar que la “histórica” rebaja fiscal supuso una merma en los ingresos fiscales de las arcas municipales de unos 52,4 millones y llevó al Ayuntamiento de València a incumplir la regla de gasto el pasado ejercicio, lo que ha obligado al consistorio a aprobar un Plan Económico-Financiero (PEF) para los 2025 y 2026.
Para este 2025, aunque se mantiene la bonifiación de la plusvalía o la rebaja del IBI, entre otros tributos, el Ayuntamiento ha tenido que corregir su rumbo fiscal y proyecta una subida de ingresos fiscales de 53.452.044 euros, lo que supone más de un 10 % de incremento respecto al ejercicio anterior. Esta subida corresponde principalmente a la nueva tasa de basuras, aplicada en cumplimiento de la Ley estatal de residuos y que se traducirá en una recaudación de unos 47 millones de euros. A ello se suma la subida del ICIO en un punto, que pasa del 3% al 4% que se traduce en una recaudación de 6,5 millones de euros.