VALÈNCIA (EP). Informes del Ayuntamiento de València han constatado la situación de "falta de mantenimiento y deficientes condiciones de salubridad" de los bloques de edificios que conforman las Casitas Rosas, en el barrio de la Malva-rosa, según ha informado el consistorio en un comunicado.

Así, ha señalado que después de las inspecciones que realizó en estos inmuebles el pasado 11 de junio, los servicios municipales de Disciplina Urbanística Municipal y Sanidad han emitido sendos informes en los que confirman la citada situación.

El concejal Urbanismo, Vivienda y Licencias, Juan Giner, ha explicado que "todas las actuaciones en Casitas Rosas se están coordinando desde el Servicio de Disciplina Urbanística, que es el que ha impulsado el expediente administrativo para elaborar un diagnóstico preciso sobre la situación urbanística, sanitaria y social de los edificios que permita también impulsar nuevos desarrollos urbanísticos de mejora del barrio de Malva-rosa".

La administración local ha apuntado que el expediente administrativo de Disciplina Urbanística sobre la Casitas Rosas está abierto y ha detallado que incorporará más informes del resto de servicios municipales que pudieran tener competencias tanto en el diagnóstico como en las actuaciones posteriores que sean necesarias acometer.

Giner ha asegurado que se pretende "elaborar entre todas las áreas y delegaciones de gestión del Ayuntamiento y los distintos servicios municipales competentes un plan de actuación real que permita mejorar las condiciones residenciales, sociales y sanitarias de estas viviendas tras tener primero una radiografía precisa de su situación".

Asimismo, ha dicho que se busca poder "afrontarlo, sobre todo, con el objetivo de ayudar a las personas y vecinos de estas viviendas más vulnerables después del abandono y la despreocupación a los que les sometieron los gobiernos --locales anteriores-- de Compromís y PSOE durante ocho años".

El informe realizado por los técnicos del Servicio de Disciplina Urbanística señala que el conjunto de edificios que conforman las Casitas Rosas "tiene un estado de conservación deficiente, principalmente por la falta de conservación". No obstante, los técnicos han indicado que los bloques "estructuralmente no presentan graves deficiencias" y que "las cubiertas tampoco presentan daños generalizados".

Este documento también expone que los edificios presentan "deterioro de la pintura de las fachadas y balcones, rotura de canalones, falta de barandillas en algunos tramos de escaleras, desprendimientos de ladrillos en algunas bóvedas de las escaleras, falta de carpintería en las ventilaciones de los forjados sanitarios, dinteles de las ventanas y puertas recayentes a las fachadas deteriorados".

"Vulnerabilidad social"

El consistorio ha comentado también que ante "la situación de vulnerabilidad social de gran parte de las residentes de estas viviendas", para afrontar las actuaciones de mantenimiento de los edificios los técnicos municipales consideran necesario realizar un estudio sobre las intervenciones que son conveniente realizar con carácter subsidiario.

Por su lado, el informe del Servicio de Sanidad concluye que "las zonas comunes de las Casitas Rosas y el patio central, presentan deficientes condiciones higiénico-sanitarias, constituyendo un foco de insalubridad que puede afectar a los propios moradores y al vecindario", además de aumentar "el riesgo de enfermedades transmisibles".

"Luz enganchada"

El informe sanitario recoge además que muchas de las viviendas "tienen la luz 'enganchada' ilegalmente" y que, "como mínimo, algunas, no disponen de agua potable corriente y deben recoger agua en garrafas", algo que "supone que no reúnen condiciones de habitabilidad".

En esta línea, señala que "con carácter general, las viviendas que no disponen de agua potable corriente, red de saneamiento adecuado y/o luz no reúnen condiciones de habitabilidad". Los técnicos municipales determinan que "se deberá dotar de agua potable corriente y luz a las viviendas que no dispongan de estos suministros".

Igualmente, ese documento destaca como necesaria "la retirara de los residuos desperdigados y acumulados en las zonas comunes y el patio interior de la manzana", a la vez que apunta que "se debe realizar un control de plagas por empresa autorizada y los tratamientos de desratización y desinsectación profesional que procedan".

"Pisando el terrreno"

Juan Giner ha afirmado que durante los ocho años de gobierno de Compromís y PSPV, de 2015 a 2023, "nadie del equipo de --el anterior alcalde, Joan Ribó (Compromís) llegó a pisar alguna de las viviendas de las Casitas Rosas para comprobar su estado".

"Ha sido con el gobierno de la alcaldesa María José Catalá (PP) cuando se han activado las inspecciones y se está trabajando para buscar soluciones", ha manifestado el edil de Urbanismo y Vivienda.

Giner ha subrayado que eso se está haciendo ahora "pisando el terreno y los bloques de edificios junto con los técnicos municipales".

Así, ha insistido en que antes "no se hizo nada por mejorar las condiciones urbanísticas y sociales de las Casitas Rosas" y ha dicho que "no se abordaron los problemas de salubridad y conflictividad vecinal".

"Se les llenaba falsamente la boca de ser el gobierno municipal más social de la historia, pero durante los dos mandatos de Compromís y PSPV le dieron la espalda a los vecinos ante problemas sociales y urbanísticos tan graves como los que se dan en las Casitas Rosas", ha apostillado.

Giner ha aseverado que esa "pasividad del anterior gobierno municipal", contrasta "con las actuaciones que ha llevado a cabo el Ayuntamiento desde que es alcaldesa María José Catalá". Así, ha señalado que en esta etapa "se ha reurbanizado la calle Pare Francisco Camacho, de manera que los coches pudieran circular tranquilamente; se ha reforzado la vigilancia de la Policía Local, se han intensificado las actuaciones de los Servicios Sociales, y se ha aprobado un convenio con la Asociación Brúfol para que haga una análisis integral de la situación social de las Casitas Rosas".