VALÈNCIA. Esta semana el Partido Popular de València ha puesto el foco en la escasa ejecución de los fondos EDUSI, el programa dedicado a la rehabilitación del barrio marítimo del Cabanyal. Los populares, basándose en un informe municipal, acusaban al gobierno municipal del PSPV y Compromís de haber ejecutado sólo un 1% de los 30 millones de los fondos, la mitad de los cuales están financiados por la Unión Europea mediante los fondos Feder.
Una cifra que fuentes del gobierno saldrían más tarde a desmentir y especificar que se trata del 5% y no del 1% lo ejecutado del programa EDUSI, y que si se tiene en cuenta las propuestas de gasto aprobadas, asciende ya al 12%. En todo caso, atendiendo a que se aprobó en 2016, que los trámites administrativos son lentos, y que deben completarse en 2021, la ejecución del 5% a día de hoy se presume reducida y se abren muchos interrogantes sobre la posible pérdida de las ayudas.
Ahora bien, existe otro programa en el que el Ayuntamiento está inmerso y cuyo aprovechamiento también peligra dado que depende de la ejecución de los fondos EDUSI. Se trata del programa 'Matchup', impulsado por la Comisión Europea, que supone un montante de 5,5 millones de euros con el mismo propósito: regenerar el Cabanyal, en este caso mediante 52 acciones sostenibles e innovadoras.
Dicho programa contempla, por ejemplo, la creación de controladores de energía para que se minimice el consumo, introducción de transportes eléctricos, puntos de cargas de vehículos, iluminación inteligente de bajo consumo, sistemas de recuperación de energía de alcantarillado para producir calor y frío y un sistema convertidor de energía de las olas del mar, entre otras medidas para regenerar barrios de ciudades europeas de una forma eficiente.
Sin embargo, si no se avanza en la regeneración efectiva del Cabanyal mediante el programa EDUSI, el consistorio tendrá muy difícil poder aplicar este programa o aplicar una buena parte de sus medidas, que están directamente ligadas a la rehabilitación de viviendas y reurbanización de calles y espacios urbanos. Asimismo, 'Matchup' contempla una línea de medio millón de euros para la contratación de personal dirigida a sacar adelante el programa, algo que tampoco se ha aprovechado por el momento.
Este proyecto, que se puso en marcha en octubre de 2017, tiene como fecha límite para su desarrollo el otoño de 2020. Y a poco más de un año de que finalice el plazo, la lenta regeneración del barrio mediante los fondos EDUSI augura para el programa de innovación un fiasco al no poder llevar a cabo buena parte de sus iniciativas. El Ayuntamiento de València se arriesga así a perder el dinero de los más de 5,5 millones de euros de los que puede disponer, dado que a estos fondos se accede por concurrencia competitiva.
Por el momento, cuenta con una página web en la que los únicos avances recogidos son dos reuniones en las que se abordaron las principales líneas estratégicas a seguir.
València fue la ciudad elegida por la Comisión Europea para coordinar este programa mediante un consorcio europeo formado por cerca de 30 entidades y al que hay dedicado un total de 17 millones de euros, de los cuales 5,5 son los dirigidos a la capital valenciana. Por parte de València, participan en dicho consorcio el Ayuntamiento, la Empresa Municipal de Transporte (EMT), Las Naves, WITRAC, la Universitat Politècnica de València (UPV), ETRA Investigación y desarrollo, el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) y Senior Europa, SL (KVELOCE).
Junto a València, las ciudades de Dresde (Alemania) y Antalya (Turquía) hacen de urbes "Faro", seleccionadas para la implementación directa de las iniciativas, que se prevén exportar más tarde a otras ciudades como Ostende (Bélgica), Herzliya (Israel), Skopie (Macedonia) y Kerava (Finlandia).
Según apuntan fuentes conocedoras del proyecto, este es uno de los únicos tres que se aprobaron en la convocatoria de 2017, enmarcada en el Programa de Innovación de la Comisión Europea "Horizon 2020". Una oportunidad que, a la postre, podría acabar traduciéndose en chasco.