VALÈNCIA. La inversión inmobiliaria no siempre ha estado al alcance de todos, pero las nuevas tecnologías lo hacen más accesible que nunca. Esto es lo que ha conseguido la empresa valenciana Bricks&People, una compañía de crowdfunding inmobiliario que inició su andadura a finales del mes pasado.
Carlos Peiró Rees, CEO de la compañía, ha lanzado dos proyectos desde cero que van desde la banca a las renovables. "En España es el momento de dedicarse al inmobiliario y al turismo", asegura. "Al ser socio de una empresa en Colombia, veía como financiaban rascacielos con un experto en crowdfunding y estudié como funcionaba".
Bricks&People ofrece la posibilidad de participar en sus proyectos inmobiliarios desde 50 euros, garantizando idéntico porcentaje de rentabilidad a todos sus inversores independientemente de la cifra que deseen aportar al proyecto. El primer proyecto fue cerrado en el Cabanyal por 129.000 euros donde el ticket medio de inversión fue de 2.500 euros
Están orientados al arco mediterráneo porque los precios en Madrid y Barcelona están mucho más altos. Su misión es comprar el inmueble, reformarlo, alquilarlo como apartamento turístico, sacarle rendimiento y repartir mes a mes las ganancias y venderlo a los 3 años.
El perfil del inversor es de entre 35 y 45 años, pero también tienen con edades por debajo y por arriba. "Hay mucha gente habituada a invertir en inmobiliario porque cuando van a un banco les pagan poco y la gente ya no quiere productos", señala y asegura que el inmobiliario da seguridad al ser un bien tangible.
"Lo que hemos hecho es ponerlo en una plataforma para que la selección de un inmueble se haga en un click y todo el proceso se hace en cualquier momento", apunta. Asegura que el crowdfunding permite que la gente que tiene capacidad financiera y solo invertía en un inmueble diversifique y todos aquellos que no tienen capacidad para afrontarlo y les gustaría poder beneficiarse de las ventajas del mercado inmobiliario lo consigan.
Además, la ventaja para los inversores es que evitan conseguir las licencias y los trámites, reformarlo y encontrar el inquilino. Lo que hemos hecho que desde invierte, se acoge una promoción le garantizamos el 5% hasta que cierra el cierre, luego reforma, y luego alquiler. Durante la ventana de inversión, los crowdfunders, a medida que han ido invirtiendo han registrado un 5% de rentabilidad anual sobre su inversión.
A partir de julio tendrán tres inmuebles ingresando y en verano un cuarto. "Ahora mismo estamos buscando viviendas por toda la costa desde Valencia hasta Alicante", asegura Peiró. "También estamos buscando por el centro histórico, pero nosotros estamos abiertos a cualquier proyecto inmobiliario que quien nos lo proponga invierta y veamos que la rentabilidad ya sea edificio o local comercial", asegura.
De hecho, Bricks&People invirtió en el primer inmueble un 38%. Peiró asegura que la recurrencia de los inversores es alta y muchos han reinvertido en el segundo crowdfunding que han abierto en la calle Benlliure.
Sobre posibles impuestos que tengan que pagar los inversores señala que se da la cifra de la rentabilidad neta a falta de descontar el IRPF. Ahora, la compañía tiene abierta una ronda de financiación en Socios Inversores.
La intención es abrir apartamentos para el turismo familiar y de alto nivel con el fin de que los comercios de la zona puedan dirigirse a ese turismo.