De Sorní a Orriols: las calles de València que están entre las más ricas y pobres de España

VALÈNCIA. En torno a un 6% de la población que habita la ciudad de València reside en calles donde los niveles de renta se encuentran entre los más modestos de todo el país, mientras que más de un 15%, alrededor de 125.000 personas, vive en áreas que se enmarcan entre las más ricas de España.

Como suele ser habitual, son los distritos más alejados del casco antiguo, como l’Olivereta al oeste o Rascanya al norte, aquellos donde se concentra un mayor número de personas con muy bajo poder adquisitivo, mientras que las zonas más céntricas, como Ciutat Vella y l’Eixample, y otras de desarrollo más reciente en Campanar o Camins al Grau, se aglutinan más vecinos con muy alto tren de vida.

Así se desprende de la última actualización del Atlas de Distribución de la Renta de los Hogares publicado recientemente por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que proporciona el detalle del reparto de la riqueza a lo largo de todo el país por secciones censales, el mayor nivel de desglose geográfico disponible.

Uno de los indicadores que el INE facilita es la renta mediana por unidad de consumo, que divide los ingresos de los hogares en función del número de miembros y sus edades para así igualar los distintos tamaños de hogar. Además, el uso de la mediana permite obtener el valor que, una vez ordenadas todas las rentas de menor a mayor ingreso, queda justo en el medio, por lo que se evitan distorsiones causadas por datos extremos.

En esta ocasión, la manzana que concentra a las rentas más elevadas de toda la ciudad se encuentra en Ciutat Vella, y más concretamente en la Xerea, justo al lado de Porta de la Mar. Allí, las viviendas delimitadas por las calles Ximénez de Sandoval y del Justicia, de un lado; y el Paseo de la Ciudadela y la plaza de Alfonso el Magnánimo, de otro; registran una renta mediana por unidad de consumo de más de 42.300 euros, un dato que, además, se sitúa entre los más destacados de España en su conjunto. Tras ella, distintas zonas de los distritos de l’Eixample y el Pla del Real aparecen también entre las que poseen mayores niveles de renta.

Respecto a este último caso, ocho de cada diez vecinos que residen en el Pla del Real lo hacen en vías donde los niveles de renta figuran entre el 10% más alto del país, un hecho que se evidencia por ejemplo en el primer tramo de la avenida de Blasco Ibáñez y la calle Micer Mascó, donde se rozan los 40.000 euros por unidad familiar. En l’Eixample, por su parte, y más concretamente en el barrio de el Pla del Remei, que se encuentra situado principalmente entre la calle Colón y la Gran Vía Marqués del Turia, es habitual encontrar del mismo modo rentas muy altas, como también algunas de las viviendas con los precios de alquiler más exclusivos de la ciudad.

Justo en ese punto se registran rentas de más de 38.000 euros por unidad de consumo en calles como Sorní o Conde de Salvatierra, y entre Jorge Juan e Isabel la Católica se superan igualmente los 37.000 euros. De hecho, en el Pla del Remei las los niveles de ingresos más bajos no descenderían en ningún caso por debajo de los 31.000 euros, una cifra impensable para otras demarcaciones de la ciudad.

Así pues, veinticuatro de las veinticinco secciones censales de la ciudad con mayor poder adquisitivo se encuentran en los distritos de Ciutat Vella, l’Eixample y el Pla del Real, mientras que una de ellas está en Campanar, y concretamente en Sant Pau, que responde a esa València de urbanización más reciente hacia donde se han desplazado muchas nuevas familias. De esta forma, en el tramo de la avenida de Maestro Rodrigo que corta con General Avilés, es posible hallar rentas todavía por encima de los 31.000 euros.

Una situación que se produce asimismo en otra demarcación de características muy similares, como es el barrio de Ciutat de les Arts i de les Ciències en Quatre Carreres, donde se superan los 31.000 euros entre la avenida de Antonio Ferrandis y la calle Ángel de Villena. No obstante, es en ese punto de la ciudad donde se observa uno de los tantos contrastes que existen entre rentas, ya que tan solo unos pasos al norte, ya en el barrio de Na Rovella, entre las avenidas de los Hermanos Maristas y de la Plata, el tren de vida desciende hasta quedarse muy poco por encima de los 12.000 euros.

Esa cifra es, de hecho, una de las más contenidas de toda la ciudad de València, aunque en puntos Rascanya, y más concretamente en el barrio de Orriols, es donde se alcanzan los valores mínimos. En concreto, en las viviendas situadas entre las calles Reig Genovés y del Duque de Mandas, apenas se llega a los 10.000 euros, y entre las vías del Arquitecto Tolsà y San Juan de la Peña no se alcanzan tampoco los 11.000 euros por unidad de consumo.

En este sentido, y pese a que en términos generales solo el 6% de la población de València habita en calles con rentas muy bajas, ese porcentaje aumenta en Rascanya hasta ubicarse casi en el 22%. Una proporción muy similar a la que se registra también en l’Olivereta, donde es posible encontrar igualmente cifras muy modestas sobre todo en Tres Forques y la Fontsanta. Es el caso de las manzanas delimitadas por la calle del Músico Ayllón y dels Jurats, donde los ingresos se sitúan en torno a los 11.500 euros, y también entre la calle de la Casa de la Misericordia y la avenida de las Tres Cruces, con rentas de poco más de 12.000 euros.

Al este, en el distrito de Poblats Marítims, tanto en Natzaret como en el Cabanyal, se identifican del mismo modo áreas con rentas por debajo de los 14.000 euros, como ocurre también al oeste en el área de Ciutat Fallera, en Benicalap, y en algunos puntos de Benimàmet, como en las vías del Maestro Chapí o de la Coronación.