VALÈNCIA. "Estamos manteniendo reuniones entre ambas partes, pero nada más lejos de estar solucionado. No tenemos claro aún como acabará esto, si en ruptura como en Chiva o no". Con estas dos frases resume Joaquín González, portavoz del Partido de Requena y Aldeas, la situación de crisis en el gobierno local que comparte con el Partido Popular.
En la localidad más populosa de la comarca Utiel-Requena el PP logró la alcaldía al sumar a sus ocho votos los tres del PRyA. No obstante, el incendio en la pedanía de San Antonio -dirigida por la formación local- el pasado mes de abril y las discrepancias con concejales populares, han abierto una herida que no ha restañado.
La consecuencia sigue siendo imprevisible. En Chiva, como recuerda González, la crisis terminó con el abandono por parte de la agrupación local Activa Chiva del ejecutivo y la minoría de la alcaldesa, también del PP.
El desenlace en Requena se amplificaría por la magnitud de la población. Se trata de una de las ocho dirigidas por partidos locales de las alrededor de una treintena que superan los 20.000 habitantes en la provincia de Valencia.
Alzira emerge como la mayor, por su censo que supera los 46.000 habitantes y se acerca a pasos agigantados a los 50.000. La vara de mando la ostenta Alfons Domínguez, de Compromís, gracias a un complejo pacto con el PSPV -esa resultó la parte sencilla- y con Ucin, formación que brotó en 2023 tras abandonar el PP una parte de su militancia. De hecho la lideró electoralmente Enrique Montalvà, concejal popular en el pasado mandato, y logró dos ediles.
Desde la Unión de Ciudadanos Independientes (Ucin) destacan la fortaleza de ese acuerdo. "Estamos aplicando una forma de gobernar basada en la gestión y primando los intereses del conjunto de la ciudadanía con independencia de la ideología política de cada uno. Nos sentimos muy cómodo", apuntan desde el partido respecto al pacto de Alzira.
En Ontinyent, el principal bastión de partido local en la provincia de València, Ens Uneix no necesitó buscar socios. Pese a perder cinco concejales en 2023 respecto a su candidatura en 2019, mantiene una holgada mayoría de 12 sobre 21 con su alcalde, Jorge Rodríguez, al frente.
También al sur de la provincia, aunque en la costa, emerge Oliva como feudo de más de 20.000 habitantes con gobierno de partido local. En este caso, de pareja: Projecte Oliva, con diez concejales, y el citado Ucin, con dos. Esta última formación nació, al igual que en Alzira, de ex del PP distanciados de sus entonces compañeros que ahora se integran en la oposición. La reconciliación todavía no se plantea.
En La Pobla de Vallbona dos agrupaciones locales: una neófita (Centrats), aunque con líder ya con experiencia de ser edil, y otra más veterana (CUPO), aportan los cuatro concejales que sustentan la alcaldía del PP que lidera Abel Martí. El acuerdo contempla rotación el último año y medio, cuando la vara de mando recaerá en el centrista Jaume Ruix.
En Bétera el partido de urbanizaciones Más Camarena-Torre en Conill constituye el báculo, con sus cuatro concejales, del gobierno de la alcaldesa popular Elia Verdevío. Lo hace por segunda vez. En 2015 se inclinó por Compromís en una compleja coalición de la que también formó parte el PSPV. "Unos no cumplieron y otros sí. Por ese motivo repetimos", recalcaba a este diario el primer teniente de alcalde y líder de la agrupación local, Carlos Abad, para explicar el pacto.
Precisamente su formación es una de las últimas que podría incorporarse a la Unión Municipalista, la plataforma que está aglutinando a partidos locales para competir en los partidos judiciales por la Diputación y, quizás, por la propia Generalitat.
Le sucede como al Partido de las Urbanizaciones de Puçol (localidad que ya ha superado los 20.000 habitantes). Desde el pasado mandato apoya al PP. De hecho, fue el único de los tres socios iniciales (junto a Vox y Cs) que aguantó hasta el final. En el actual periodo de gobierno aporta el concejal decisivo, el de la mayoría absoluta. También podría incorporarse a Unión Municipalista.
Como ya lo hizo Sueca per Davant, la formación local que gestiona Sueca junto al PSPV y que, con sus tres votos, otorga la mayoría absoluta al socialista Dimas Vázquez.
Se trata del octeto de municipios dirigidos por partidos locales. En seis de los casos, en coalición con PP, PSPV o Compromís. David García, presidente a escala nacional de Unión Municipalista, asegura que, excepto en Requena, en el resto de localidades citadas no tiene constancia de divergencias entre socios.
Lo hace mientras recuenta el número de formaciones inscritas al proyecto que encabeza en la provincia en su plataforma. "Tenemos adheridas 35 formaciones políticas (entre partidos y agrupaciones) que en total suman alrededor de 70 agrupaciones locales -Ucin, por ejemplo, cuenta con alrededor de una decena, y Ens Uneix la supera-", destaca, para apuntar las nuevas incorporaciones de la Agrupación de Electores que gobierna Losa del Obispo, de Unión Popular de Náquera, de la Agrupación Electorales la Torre de Portacoelia en Serra o de Juntos por Zarra.
Si hace un par de semanas celebraron en Requena su primer congreso en la provincia de Valencia para escoger a Natalia Enguix -tal como anticipó este diario- en el rol de coordinadora, el próximo sábado se reunirán en Muro de Alcoy para hacer lo propio en la provincia de Alicante y organizarse por partidos judiciales.