VALÈNCIA. El estallido de la pandemia el pasado mes de marzo obligó a los partidos políticos valencianos a realizar cambios en sus calendarios orgánicos. La mayoría, de hecho, decidieron posponer sus procesos para celebrarlos cuando la situación sanitaria lo permitiera. Entre ellos, el Bloc, que aplazó su VIII Congrés Nacional a 2021.
El partido se enfrenta, nada menos, a un debate sobre un posible cambio de nombre y a una reorientación política, pero también a la renovación de los cargos de su ejecutiva, cuyo mandato finalizó el pasado mes de mayo. Una situación que la corriente de Bloc i País quiere que se resuelva como tarde en junio mediante una votación telemática.
Esta facción de la formación nacionalista celebró el pasado fin de semana su asamblea. En ella, acordaron exigir al partido que junio sea fecha límite para renovar a los cargos de la Ejecutiva Nacional del Bloc "porque entonces ya llevarán un año en funciones, una cuarta parte de la legislatura".
"La propuesta que elevará Bloc i País a la Comissió Organitzadora del Congrés mediante sus representantes es que haya una votación telemática en junio para renovar a sus cargos", añadía el comunicado del pasado sábado basado, según el escrito, en el modelo de congreso "propuesto por la dirección, que pasaría de ser asambleario (en el que pueden participar todos los militantes) a ser por delegación (en el cual, por tanto, la participación quedaría limitada a la elección de estos representantes para el congreso)".
En este sentido, conviene señalar que varios militantes del Bloc llevan meses pidiendo poder celebrar un congreso de forma telemática. Sin embargo, esta petición no se ha llegado nunca a atender porque según fuentes próximas a la dirección de la formación nacionalista la comisión de garantías ya resolvió tiempo atrás que realizar un congreso de estas características no se ajustaba a los estatutos del partido.
Ahora bien, el próximo 6 de marzo el Consell Nacional del Bloc se reunirá con la intención de estudiar una propuesta de modificación del reglamento precongresual para adaptar el cónclave si la situación sanitaria lo requiere. Es decir, si la Conselleria de Sanidad no permite la celebración de un acto de semejantes características por razones de seguridad.
En esta propuesta, según fuentes consultadas por este diario, se plantea la posibilidad de que el congreso no se celebre con toda la militancia de forma presencial, sino que se haga solo con delegados para reducir así el aforo. Una proposición a la que seguiría -siempre en caso de aprobarse- otra de la la COC: que la elección de esos delegados por parte de la militancia pueda realizarse de forma telemática, también por motivos de salud.
Con estos mimbres, la corriente de Bloc i País trasladan a este diario que si se puede realizar una votación telemática de delegados, también debería facilitarse que se copie este modelo para abordar el voto telemático "universal" y que sean todos los militantes los que participen en el sufragio sin compromisarios de por medio.
"La propuesta de Bloc i País también considera que el resto del Congrés, como el debate de las ponencias Organizativa y Política, se debe posponer un tiempo más, hasta que la situación sanitaria sea mejor y se puedan debatir todas estas cuestiones con la misma seguridad, participación y profundidad necesaria", exponía la corriente en su comunicado.
El portavoz y coordinador de Bloc i País, Vicent Fernández i Capilla, consideró que no sería "malo" que se desligara "el debate sobre personas del debate sobre la organización". "Tenemos una Ejecutiva Nacional que lleva mucho tiempo en funciones, cuando además ha tenido una vida convulsa que se ha traducido en la dimisión de una buena parte de ella, cosa que la convierte en políticamente agotada desde antes de acabar la legislatura. Por tanto, la renovación es inaplazable y se debe hacer con máxima participación", concluyó Capilla en la asamblea del pasado sábado.
