VALÈNCIA (EP). El Consell de l'Horta de València (ChdV), adscrito a la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, ha solicitado al ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la declaración de zona catastrófica para la huerta de Valencia por el episodio de lluvias intensas y persistentes que se produjeron durante los primeros días del mes de mayo.
El pasado 3 de mayo, la ciudad de València y sus alrededores sufrieron una fuerte tormenta estática que "batió todos los récords históricos de lluvia de la ciudad". Los registros de precipitaciones acumulados en la huerta de València superaron, en algunos puntos, los 260 litros por metro cuadrado en 24 horas, convirtiendo este mes en el de mayor índice registrado en València y las comarcas de l'Horta, ha indicado la Generalitat en un comunicado.
Una primera evaluación económica del impacto material derivado de esta adversidad meteorológica sitúa las pérdidas directas ocasionadas a la agricultura de la zona de la huerta de València en más de 60 millones de euros, a los que hay que añadir los daños ocasionados en infraestructuras agrarias.
Las pérdidas han afectado "significativamente" a las cosechas de verano, así como a las que han quedado anegadas por el agua, con el consiguiente perjuicio para el sector.
Este episodio de lluvias, unido a otras inclemencias climáticas que se han producido en los meses de noviembre y diciembre de 2021 y enero de 2022, remarca la Conselleria. Estos fenómenos, además, han "obstaculizado" el ciclo normal de producciones como la patata y la cebolla, así como operaciones básicas de siembra de la chufa o de otros cultivos de verano como el melón y la sandía.
Para la Administración autonómica, todos estos datos avalan la petición por parte del Consell de l'Horta de València de la declaración de zona catastrófica para la huerta de València y sus comarcas.
El Consell de l'Horta de València, creado en febrero de 2020 por la Generalitat Valenciana, tiene por objeto garantizar la pervivencia y promover la dinamización de las actividades agrarias en la huerta de Valencia, fomentando una agricultura más respetuosa con el medio ambiente, la posibilidad de permitir usos y actividades complementarios y compatibles con las actividades agrarias, para mejorar la sostenibilidad económica, social y ambiental del territorio.