Las incertidumbres generadas por los resultados electorales también parece que puedan afectar a nuestras misiones internacionales que lo que más necesitan es estabilidad y certidumbre, esperemos que no.
VALENCIA. Este pasado 20D será recordado, tras la aparición de los partidos emergentes, como el punto de inflexión del régimen constitucional de 1978, pues, o va a suponer una ruptura con el sistema de alternancia de dos partidos en el gobierno que daba al sistema una gran estabilidad, o el PP y PSOE, tras metabolizar los cambios políticos producidos desde aquel ya lejano 15M, prácticamente refundarse, y recuperarse a medio/largo plazo saliendo más reforzados de la crisis gracias a la generosidad y sentido de Estado de sus actuales líderes.
En la esfera internacional, y al margen de las incertidumbres económicas que generan los posibles pactos, en las cuestiones estratégicas y alianzas políticas me aventuro a adelantar que la política debería ser/será continuista, dado nuestro nivel actual de ambición y por los motivos que a continuación voy a explicar, al margen de posibles golpes de efecto si existe un gobierno con participación podemita.
La política internacional de España, y en consecuencia la acción exterior del Estado en nuestros días, usando a los Ejércitos como instrumento fundamental, viene marcada en primer lugar por nuestra participación en ese gran proyecto que es Europa materializado en la compleja organización que es la UE. Además gran parte de ellos (la mayoría) comparten de forma colectiva su seguridad en la OTAN con la participación de la primera democracia del mundo, los EEUU (socio que aporta el verdadero músculo estratégico de la organización). Finalmente la pertenencia a las Naciones Unidas y, aunque sea de forma temporal, a su Consejo de Seguridad será otro de los elementos determinantes junto con los condicionantes de nuestras relaciones con el mundo musulmán-norte de África y nuestra comunidad de intereses con Iberoamérica, además, y de forma concordante a varios de los anteriores, nuestra preocupación por el Mediterráneo tan importante para los valencianos (además por supuesto del resto de españoles).
De las 15 misiones internacionales actuales de nuestras Fuerzas Armadas (según la propia web del MINISDEF): 1º, una de ellas (la que más tropas tiene) es FINUL en el Líbano, siendo una misión de la ONU, a la que ningún partido parece objetar nada al ser de Naciones Unidas), 2º ocho misiones son de la UE (incluyendo su apoyo logístico) y ninguno de los 4 principales partidos de las elecciones del 20D se han opuesto públicamente a la PESC/PESD de la UE (política exterior y de seguridad y defensa europea), 3º cuatro de la OTAN entre las que se incluyen dos navales (casi en paralelo a misiones UE), con un despliegue de apoyo antiaéreo en Turquía que, aunque la zona es complicada, el riesgo es relativamente bajo, y un pequeño contingente en los Cuarteles Generales de Kabúl que a pesar del último atentado no parece que nadie pida repliegues ni retiradas, 4º una de entrenamiento contra el Estado Islámico en Irak dentro de la gran coalición anti-DAESH, que en caso de haber incidentes podría ser objeto de algún debate, y 5º finalmente una de apoyo o Diplomacia de la Defensa en Cabo Verde, que parece estar ya de repliegue justo en estas fechas.
Todas estas misiones, creo en principio, no se verán alteradas (otra cosa serán las nuevas) respeto a las tres posibles opciones post electorales, primero la repetición de elecciones en la primavera al no alcanzarse ningún tipo de pacto (continuidad de las misiones actuales dentro de la incertidumbre general), otra posibilidad sería un gobierno en minoría del PP, que no tiene que estar encabezado obligatoriamente por el actual presidente, dado el precio que exigirán los partidos que con su abstención tendrían que apoyarle (mayor continuidad) y finalmente la conformación de un gran bloque de izquierdas con más de una decena de partidos o movimientos sociales con una heterogénea concepción del Estado, y que podría rememorarnos la retirada de Irak de Zapatero, aunque parece que de las misiones existentes no han sido objeto de su debate electoral (otra cosa es una nueva y mayor participación en el desafío del integrismo Islámico, ISIS, Boko Haram... ) y los menos "continuistas", Podemos, no introducen ninguna gran novedad al respecto en su programa electoral, sólo, por ejemplo, que para "misiones de calado" se someterá a consulta ciudadana directa la participación española en lugar de hacerlo a través del Congreso, pues dan su apoyo a seguir en la OTAN al hablar de "apoyar la compatibilización de la OTAN con una arquitectura de seguridad paneuropea", lo digo por ese karma de la izquierda OTAN NO BASES FUERA.
Por eso mi análisis es que existirá una acción exterior continuista (en el ámbito de la Seguridad y Defensa) dentro del actual nivel de ambición estratégica española, pero otra cosa será si es suficiente este nivel ante el entorno de incertidumbres estratégicas y amenazas asimétricas del futuro que ya es presente.
El líder de Podemos rechaza "por activa o por pasiva" cualquier posibilidad de que Rajoy sea presidente y califica de "urgente" la necesidad de una ley de emergencia social