El exgerente de Imelsa explica que Rus, Llopis, Medina y Caturla entraron en la Diputación para recaudar

VALENCIA. Recaudar dinero y enriquecerse. Tan simple y bochornoso como eso. La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil no tiene dudas, más después de que el exgerente de Imelsa Marcos Benavent haya delatado a la cúpula de este entramado presuntamente pseudomafioso, tal y como ha podido comprobar Valencia Plaza tras tener acceso al sumario de la causa.

Al frente, el expresidente de la Diputación Alfonso Rus. Junto a él, sus tres personas de confianza Emilio Llopis, su ex jefe de Gabinete, el exvicepresidente de la Diputación Juan José Medina y el exgerente de Ciegsa Máximo Caturla.

Benavent es claro en sus decaraciones, y la UCO las recoge en un sobrecogedor informe que no deja lugar a las dudas. Los agentes explican cómo se ha podido constatar que “existía un elevado interés por parte de una parte de los investigados para alcanzar la presidencia de la Diputación de Valencia porque supondría una mayor capacidad de gestión de presupuesto y un cambio en la forma de recaudar dinero procedente de comisiones".

Su recaudador oficial, el autoproclamado Yonki del Dinero, Marcos Benavent. Sus especialidades: amaños de contratos y mordidas. Benavent ha confesado y sus palabras hacen temblar los cimientos del que fuera su partido, el PP. 

Asevera que lo pusieron al frente de Imelsa por “el importante papel desarrollado como recaudador, y lo mucho que sabía a ese respecto le ayudó a que le dieran ese puesto de responsabilidad desde el que iba a poder seguir recaudando aunque de otra forma”.

Explica en su informe la UCO que a partir del año 2007, año en el que Rus se puso al frente de la Diputación comenzaron las acciones presuntamente delictivas para conseguir beneficios ilícitos.

Sin porcentajes

El yonki del dinero explica que en las mordidas de los contratos del Ayuntamiento de Valencia no había un pocentaje establecido, que se repartía según surgía y tal y como ordenaba la imputada y exconcejal de Cultura del consistorio, María José Alcón, mando que antes ostentaba el exmarido de Alcón Vicente Burgos, siempre según Benavent, aunque apunta que con él tenían cuidado para que no se lo gastara en sustancias ilegales.

En referencia al equipo de fútbol Olimpic de Xàtiva, del que Alfonso Rus fue presidente, Benavent dice que entregó dinero al club durante varios años y que el contrato del césped, también bajo investigación, se hizo así porque era como se hacía siempre.